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7 Mar 2012

Alimentación para trabajos con horarios especiales

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Trabajadores de turno de noche es frecuente que se produzcan manifestaciones inmediatas, que son trastornos sin importancia aparente, como: irritabilidad, humor cambiante, estreñimiento, falta de apetito, dificultades para conciliar el sueño, fatiga, estrés y una alimentación inadecuada, provocando sobrepeso.

Uno de los motivos que puede provocar sobrepeso es cambiar el ritmo circadiano porque hay una relación entre sueño y regulación del peso, que el no dormir o tener un desequilibrio del sueño influye en dos hormonas: leptina (hormona de la saciedad) y grelina (hormona del apetito).

Actualmente, en la industria existen turnos llamados 3 x 8, con esta fórmula el trabajador nunca se adapta al horario ni a las ingestas de alimentos, ya que cambian todas las semanas de turno, y cuando ya se están adaptando al turno que les corresponde en ese momento, lo tienen que cambiar y empezar de nuevo.

Desde el punto de vista dietético, hay que mantener las 3 comidas principales, incorporando  una comida nocturna. En este caso, las ingestas tenemos que reducirlas, ya que incorporamos una más principal.

Mucho trabajadores se lleva esta comida nocturna de casa, porque a media – noche, no hay empresas abiertas de comida, pero además, no se preocupa de lo que se llevan y van a lo fácil: panecillos, tortillas o embutido bastante graso,… olvidando por un momento de llevar una alimentación lo más saludable posible a esas horas de la noche. Por eso, hay que organizar esta ingesta y evitar comer algo copioso, con lo cual tiene que ser baja en grasas, además tenemos que disminuir la sensación de pesadez. Cuanto más ligera sea mucho mejor, eso si, debemos incluir todos los nutrientes necesarios para realizar correctamente el trabajo.

Si pasado 3 o 4 horas de esta ingesta nos entra algo de hambre podemos tomar un tentempié ligero o directamente esperarnos a desayunar.

Un ejemplo de distribución de las 24 horas de un día de un trabajador puede ser la siguiente:

  • 8:00 horas. Desayunar.
  • Descanso
  • 14:00 horas. Comida de medio día.
  • 18:00 horas. Merienda.
  • 21:30 horas. Cena.
  • 23:00 horas. Inicio del turno de trabajo.
  • 2:00 horas. Comida nocturna.
  • 5:00 horas. Tentempié.
  • 7:00 horas. Fin de la jornada laboral.

Para concluir, hacer turnos de trabajo no significa no cuidarse, sino que tiene que cuidarse más y no solo en la alimentación, sino también con el ejercicio físico, porque esta práctica, puede disminuir los efectos de trabajar de noche.

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