Aportaciones teóricas en la concepción del entrenamiento deportivo moderno
PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DEL ENTRENAMIENTO.
A través de las numerosas disertaciones sobre el término que venimos desarrollando se puede llegar a conocer los elementos comunes que lo identifican. Autores como González (1985) y Harre (1987) se han ocupado de recoger algunas de sus características, como por ejemplo:
- El entrenamiento deportivo es un proceso y como tal hay una inferencia temporal hacia el futuro con un carácter racional en la consecución de unos objetivos.
- Se orienta hacia el alcance del máximo rendimiento, o de forma general, a optimizar el despeño físico del deportista hacia niveles máximos.
- Es sistemático y planificado ya que así es la única alternativa para que al final del proceso sean alcanzados plenamente los objetivos.
- Es un proceso individual, debido a que cada deportista tendrá unas características y una capacidad de trabajo diferente a los demás que hará que los resultados obtenidos por diferentes sujetos sean distintos bajo un mismo patrón de entrenamiento, o que los mismos resultados se obtengan a través de procesos totalmente diferentes de preparación.
- Tiene un carácter pedagógico ya que se está formando en todo momento y en diferentes ámbitos al deportista.
- Tiene un carácter científico porque sobre el entrenamiento repercuten otras ciencias que permiten mejorar su eficiencia gracias a los nuevos avances y a los nuevos logros en su estudio.
LOS COMPONENTES DEL ENTRENAMIENTO DEPORTIVO: LOS OBJETIVOS.
Entendemos por componentes del entrenamiento aquellos elementos presentes en el proceso que, desde una perspectiva pedagógica, permiten construir su estructuración y desarrollo de forma racional, sistemática y planificada en el tiempo con el fin de permitir adquirir o desarrollar tanto las habilidades motrices como las capacidades condicionales de la forma más eficiente posible y de acuerdo a las características individuales. A continuación desarrollaremos uno de los aspectos más importantes: los objetivos del entrenamiento, y trataremos de recoger brevemente algunas particularices de otros elementos igualmente fundamentales: los contenidos, los medios y los métodos del entrenamiento.
Objetivos del entrenamiento deportivo.
Los objetivos del entrenamiento son la formulación de una serie de aspiraciones que deberán ser alcanzadas por los deportistas a través del entrenamiento para mejorar las habilidades y resultados tras un periodo de tiempo. Generalmente los objetivos se proyectan en un plazo de tiempo relativamente largo, estableciendo metas con un carácter general de consecución en su inicio, siendo éstas cada vez más específicas a medida que el nivel de maestría es gradualmente mayor (Manno, 1991). Desde un punto de vista psicológico, Dosil (2004) sostiene que el establecimiento de objetivos es una técnica que afecta positivamente en la motivación de los deportistas, así como en otras variables importantes como la concentración, la ansiedad/estrés, la autoconfianza o la cohesión de grupo.
Según González (1985), en el deporte podemos encontrarnos diferentes clasificaciones de los objetivos en función de los criterios utilizados. Este autor estructura los objetivos deportivos en dos niveles principales, según su nivel de concreción:
A. Primer nivel:
-Objetivos motores: orientados hacia los aspectos técnicos y condicionales de la modalidad deportiva. -Objetivos cognoscitivos: vinculados con la táctica deportiva. -Objetivos afectivos: relacionados con el desarrollo de las capacidades volitivas, agonísticas y actitudinales de los deportistas.
B. Segundo nivel:
-Objetivos condicionales: orientados hacia el desarrollo de las cualidades físicas.
-Objetivos técnicos: dirigidos a la adquisición y automatización de la maestría técnica.
-Objetivos tácticos: encaminados a la adquisición y automatización de las estrategias y procedimientos tácticos. -Objetivos intelectuales: establecidos para la adquisición de los conocimientos teóricos.
-Objetivos psicológicos: diseñados para la adquisición de las cualidades psíquicas y predisposiciones mentales en relación a la modalidad deportiva practicada.
Grosser y cols. (1989) de igual forma, hacen referencia a tres categorías de objetivos. Por una parte hablan de objetivos primarios, relacionados con el logro de grandes fines en el entrenamiento, como mejorar una marca personal, subir de categoría, etc. Por otra parte estarían los objetivos parciales, que son aquéllos que se vinculan con uno de los ámbitos particulares de trabajo, ya sea éste la condición física, la técnica, la táctica o el componente psicológico (Albesa y Lloveras, 1999). Y por último estarían los objetivos específicos, que son aquéllos fines concretos que se pretenden alcanzar dentro de cada uno de los ámbitos que reflejábamos anteriormente. Por ejemplo, en el caso de la condición física podríamos hablar de objetivos relacionados con la fuerza, la resistencia, la velocidad, etc.
En relación a las consideraciones que realizan Bompa (2003), Grosser y cols. (1989) y Ozolín (1983) respecto a la consecución de objetivos primarios, los autores afirman que la orientación de los deportistas puede variar de unas situaciones a otras, o de unos sujetos a otros, sin embargo, los objetivos primarios suelen corresponderse con los fines últimos que justifican la participación en la actividad deportiva, como por ejemplo ganar una competición, mejorar un resultado deportivo, aprender una habilidad técnica o lograr el mayor desarrollo posible de su capacidad física.
Para Martin y cols. (2001) los objetivos principales del entrenamiento deportivo, desde un punto de vista general, se corresponderían básicamente con las siguientes afirmaciones:
- Influir de modo sistémico sobre los estados de rendimiento deportivo visibles en el individuo.
- Exhibir rendimientos deportivos.
- Conseguir los mayores éxitos individuales, en particular en la competición deportiva.
Por su parte Bompa (2003, 1983) establece una serie de objetivos más específicos:
- Conseguir un desarrollo físico multilateral: el deportista necesita aumentar y mejorar todas y cada una de sus cualidades físicas para conseguir un desarrollo armónico de su cuerpo.
- Asegurar y mejorar un desarrollo físico específico del deporte: es necesario que el deportista potencie las manifestaciones de fuerza, resistencia, flexibilidad o velocidad más solicitadas en su disciplina deportiva, así como los movimientos específicos, el tiempo de reacción, la coordinación, etc.
- Desarrollar y mejorar los elementos técnicos del deporte: se trata de mejorar paulatinamente la técnica específica de cada deporte con el fin de rentabilizar al máximo el movimiento realizado tanto en condiciones estándar, como en situaciones de juego no estandarizadas, en condiciones de fatiga, etc.
- Desarrollar y mejorar los factores tácticos y estratégicos del deporte: se pretende ir adquiriendo, perfeccionando y diversificando las reglas tácticas de juego desarrolladas en torno a un modelo que permitan dificultar las acciones de futuros adversarios.
- Conseguir una buena predisposición psicológica ante la práctica: el rendimiento deportivo se ve incrementado si hay una correcta preparación psicológica del deportista que asegure determinadas cualidades volitivas relacionadas con la disciplina de equipo, la fuerza de voluntad, la seguridad o la valentía entre otros.
- Asegurar la cohesión de grupo:
- en los deportes colectivos principalmente, la preparación del equipo depende del ambiente y la armonía de sus miembros, por lo que es fundamental establecer la concordia y la unidad entre todos.
- Favorecer un estado de salud óptimo para cada deportista: es fundamental respetar la salud general del deportista durante todo el proceso de entrenamiento, sin que ello conlleve riesgos para su integridad física, orgánica o vital.
- Prevenir lesiones:
- es importante alejar al deportista de situaciones que puedan desencadenar lesiones con el fin de asegurar no solo su integridad física, sino también las ganancias oportunas en la progresión del entrenamiento.
- Incrementar los conocimientos teóricos de los deportistas: igualmente es necesario que los deportistas conozcan aspectos fisiológicos, psicológicos, condicionales, nutricionales, de planificación, etc. relativos a su propio deporte a través de los cuales se pueda completar su formación.
Por su parte Manno (1991), en relación a la clasificación anteriormente expuesta, incluye un nuevo aspecto que estaría relacionado con la necesidad de desarrollar una capacidad individual en el deportista que le permita realizar una síntesis de todo aquéllo que adquiere durante los entrenamientos.
Contenidos, medios y métodos del entrenamiento deportivo.
Los contenidos, los medios y los métodos de entrenamiento han sido abordados y desarrollados por diversos autores (Colli y cols., 1989; Matveiev, 2001; Vasconcelos, 2000; Weineck, 1988). A pesar de la dificultad terminológica existente en la literatura para diferenciar unos y otros, podemos entender como:
- Contendidos del entrenamiento: los elementos que constituyen los entrenamientos, es decir, los ejercicios físicos que debe realizar el deportista durante las sesiones de entrenamiento.
- Medios del entrenamiento: todos aquellos elementos que son de utilidad para desarrollar el entrenamiento deportivo, ya sea a nivel organizativo (estructuración y formación del trabajo), en cuanto a los materiales utilizados (balones, máquinas de musculación, pulsómetros, conos, etc.) o a nivel informativo (la voz, los gestos, los estímulos sonoros, cinestésicos, etc.).
- Métodos del entrenamiento: procesos sistemáticos y racionales de ordenación y presentación de los contenidos de trabajo
de acuerdo con los objetivos propuestos, como por ejemplo el método de repeticiones simple, el método continuo, el método interválico, etc.
Tanto los contenidos, como los medios y métodos de entrenamiento van a estar supeditados a los objetivos de entrenamiento.