Los modelos corporales en las fotografías de los libros de texto de educación física de la e.s.o.: análisis de dos editoriales

Introducción.

Dentro del marco de esta investigación, la importancia del libro de texto dentro del Sistema Educativo “viene dada por su carácter de vehículo de socialización que permite la adaptación de los alumnos a los valores establecidos en una determinada formación social” (Valls Montes 1983. Citado por Pastor Pradillo 2005.). A pesar de que el área de Educación Física se ha relacionado casi exclusivamente con la utilización de materiales propios de la práctica físico-deportiva como los balones, los conos, las colchonetas o los aros, estudios recientes reflejan una tendencia a utilizar materiales impresos como facilitadores de los contenidos teóricos de esta área (Devís y Peiró 2004). Las imágenes tienen un gran poder en todos los ámbitos de la vida, de ahí expresiones como “el aire que respiramos se compone de oxígeno, hidrógeno e imágenes” (Luengo y Blázquez 2004). Las imágenes, y especialmente las fotografías, se exhiben en todo momento como reflejo objetivo de la realidad, pero lo cierto es que las imágenes no son neutras sino que están mediatizadas. La falta de reflexión sobre las imágenes impresas en los libros de texto puede hacer que se reproduzcan una serie de estereotipos sin tan siquiera cuestionar la validez de los mismos y, en consecuencia, que se construya una idea del mundo tremendamente subjetiva y parcializada. Existen algunos estudios dentro del ámbito de la actividad física y el deporte que ponen de manifiesto la reproducción de estereotipos que se origina a través de las imágenes. Ejemplo de ello es el trabajo de Cristina López (2005) centrado en las imágenes publicitarias. De este modo, parece lógico pensar que la transmisión de determinados modelos corporales mostrados en otras investigaciones pueda presentarse de un modo similar en los libros de texto de EF. Por este motivo se emprende una investigación cuyo objetivo principal es “analizar las imágenes impresas en los libros de texto de EF para la etapa correspondiente a la ESO”. En esta comunicación se desarrollan tan sólo algunos de lo objetivos específicos: “Describir las características de los cuerpos que se presentan en las fotografías de los libros de texto de EF de la ESO” y “Establecer si existen relaciones entre determinados modelos corporales y el tipo de actividad física con la que aparecen vinculados en las fotografías de los libros de texto de EF de la ESO”.

1. Material y método.

El estudio es principalmente de tipo empírico, descriptivo y utiliza el análisis de contenido como técnica central de la investigación. Las fotografías editadas en los libros de texto de EF para la etapa de ESO son las unidades de muestreo. Se excluyen las imágenes en las que no aparece la figura humana –dimensión cuerpo– y en las que no se distingue el “tipo” de actividad física representado. En el presente trabajo se exponen los resultados de una primera fase de la investigación que utiliza un corpus reducido y que se obtienen a partir de un análisis frecuencial, concretamente, distribucional de tipo estadístico. Se utilizan los libros de texto más recientes de E.F. para la ESO publicados por las editoriales Paidotribo y Anaya. La muestra está formada por un total de 242 imágenes, 99 son editadas en los libros de texto de Paidotribo y 143 en los libros de la editorial Anaya. El procedimiento seguido para seleccionar las editoriales responde a una elección de casos individuales. El análisis de contenido se lleva a cabo a través de la codificación de las imágenes mediante un sistema de categorías previamente elaborado. Los pasos para la construcción de esta herramienta de análisis son: 1. Prueba piloto de pertinencia de la “ficha de análisis para la imagen fija publicitaria” (López 2005), 2. Adaptación de la ficha inicial, 3. Segunda prueba piloto, 4. Consulta a expertos, 5. Reelaboración en base a la consulta a expertos, 6. Segunda consulta a expertos y 7. Triangulación con tres observadores. En las fases de consulta a expertos se utiliza una ficha-cuestionario dónde se solicita a los expertos su opinión sobre una serie de ítems: adecuación del sistema de categorías elaborado al objeto de estudio; criterio de exhaustividad; criterio de mutua exclusividad; claridad en la redacción de las definiciones de las dimensiones, categorías e indicadores que conforman el instrumento de observación; y minimización de la subjetividad del observador. Las respuestas se recogen a través de la escala de Likert – valores del 1 al 5– y mediante información cualitativa. Además, se añade un sexto enunciado en el cual pueden destacar cualquier aportación que consideren de especial relevancia en relación al instrumento de análisis de imágenes que se les presenta. Se presentan como criterios de cientificidad: la realización de dos pruebas piloto, la discusión en grupo, la consulta a expertos, la triangulación con tres observadores –a partir de la cual se obtiene un coeficiente de correlación superior a 0,8– y la descripción minuciosa del proceso seguido. El sistema de categorías empleado como instrumento para el análisis de las imágenes está formado por dos grandes bloques. El primero de ellos se centra en las características técnicas de la imagen –tipo de plano y tipo de enfoque–. El segundo bloque es de análisis de contenido propiamente dicho. Este segundo apartado se divide en dos dimensiones que articulan el estudio: dimensión cuerpo –formada por las categorías: sexo-agrupación, edad, raza, somatotipo e indumentaria– y dimensión actividad física –con las categorías: tipo, ámbito de práctica, espacio y nivel–.

2. Resultados.

En los libros de texto de la editorial Paidotribo el 43,5% de las imágenes representan a grupos de hombres. Este porcentaje unido al 22,4% de imágenes en las que aparece un solo hombre, configuran un 65,9% de presencia únicamente masculina frente al 25,9% de imágenes constituidas exclusivamente con mujeres. Tan sólo el 8,2% restante simboliza fotografías en las que hombres y mujeres conviven juntos. En el caso de la editorial Anaya la categoría más frecuente es “grupo de hombres-mujeres” (31,5%). Además, la diferencia entre presencia masculina y femenina es menor que en el caso anterior –un 40,8% frente al 27,8%–. En el caso de la editorial Paidotribo el 77,5% de las imágenes presentan sujetos catalogados como “jóvenes”, seguido por un 18,8% de imágenes con “niños/adolescentes”. Los libros de la editorial Anaya contienen un 46,1% de imágenes con sujetos “jóvenes”. La presencia de “niño/adolescente” es de un 19,7%. La moda (valor más frecuente) para la categoría “raza” es, tanto para los ejemplares de la editorial Paidotribo (Gráfico 1) como para los de Anaya (Gráfico 2), el indicador “blanca”; en Paidotribo con un 59,7% y en Anaya con un 86,6%.

Gráfico 1. Análisis descriptivo de la “raza” en Paidotribo.

Gráfico 2. Análisis descriptivo de la “raza” en Anaya.

En los libros publicados por Paidotribo no existen imágenes dónde aparezcan individuos de raza “indígena latinoamericana”. En el caso de la editorial Anaya no existe ninguna imagen que refleje la presencia de sujetos de raza “asiática”, “indígena latinoamericana” o de “otras” razas. En la categoría “somatotipo”, tanto las imágenes publicadas por la editorial Paidotribo como por la editorial Anaya representan mayoritariamente un “somatotipo” enmarcado en el indicador “combinación”. Los porcentajes son del 78,9% y 86,6% respectivamente. En cuanto a las medidas de asociación, los resultados de la prueba Chi-cuadrado en las imágenes editadas por Paidotribo muestran que las variables “sexo” y “tipo” de actividad física son dependientes (Tabla 1). Las mujeres aparecen relacionadas con el deporte en menos casos de los que cabría esperar mientras que los hombres se vinculan con las prácticas deportivas y no con otro tipo de prácticas. Lo mismo ocurre en el caso del “nivel” de práctica, dónde las mujeres se relacionan con la élite en menos ocasiones de las que cabría esperar si las variables fuesen independientes.

Tabla 1 Frecuencias sexo-tipo de actividad física en Paidotribo.

En la categoría “raza” los individuos de razas diferentes a la blanca aparecen relacionados con el deporte (Gráfico 3), con la competición (Gráfico 4) y con la élite (Gráfico 5) en más casos de los que cabría esperar. Sin embargo, su presencia en otros ámbitos como el educativo es prácticamente inexistente.

Gráfico 3. Asociación raza-tipo, Gráfico 4. Asociación raza-ámbito

Gráfico 5. Asociación raza-nivel.

3. Discusión.

Los resultados obtenidos muestran la desigualdad existente entre la figura masculina y la femenina. Los cuatro libros publicados por la editorial Paidotribo descubren un rotundo predominio del hombre en sus fotografías. Estos datos ratifican los obtenidos por González Pascual (2005), que incurren en la superioridad de frecuencia de aparición de personajes masculinos en los libros de texto de Educación Física, y por Parra Martínez (2002), que concluyen que la mujer está mucho menos representada que el hombre tanto en las ilustraciones como en el lenguaje escrito de estos libros. López (2005) en su tesis sobre la imagen fija publicitaria indica que el 70,2% de las imágenes se refieren a jóvenes. El análisis descriptivo realizado en este trabajo también revela que los jóvenes siguen apareciendo como los destinatarios de la actividad física y del deporte. Esto se observa en el alto porcentaje de fotografías en las que aparecen sujetos cuya apariencia es de entre 18 y 35 años de edad. El preámbulo de la Ley 1/1990 de Ordenación General del Sistema Educativo señalaba que “la educación permite, en fin, avanzar en la lucha contra la discriminación y la desigualdad, sean éstas por razón de nacimiento, raza, sexo, religión u opinión”. En la actualidad la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación presenta la educación como un medio de “fomentar la convivencia democrática y el respeto a las diferencias individuales, de promover la solidaridad y evitar la discriminación, con el objetivo fundamental de lograr la necesaria cohesión social.”. Entonces, parece incongruente que la presencia de personas de razas diferentes a la blanca sea prácticamente nula en los libros de texto, cuando la incorporación al Sistema Educativo Español de alumnos de diferentes nacionalidades, culturas, razas y religiones es una realidad en los últimos años. A la vista de los resultados obtenidos, no se puede concluir que las imágenes impresas en los libros de texto de E.F. reproduzcan estereotipos relacionados con los modelos de cuerpo o “somatotipos” popularmente ligados con la actividad física como ponen de manifiesto otros estudios. Así, el estudio de Hernández, Cortés, Rodríguez, Menéndez y Barbero (1993) mantiene que en el cuerpo masculino se realzan todas las zonas que permiten exhibir una marcada definición muscular. El trabajo de González, Contreras, Kirk, Carrasco y Rodríguez (2004) concluye que la actividad física reproduce estereotipos masculinos como la cultura del músculo y femeninos como la cultura de la delgadez. Por su parte, Barbero (2005) alude a “los modelos del esbeltofirme- y-sin-grasa cuerpo 10 femenino, y del joven-guapo-y-tonificado varón metrosexual”. Parra (2002) señala que hay una presencia muy superior de hombres que de mujeres en las actividades deportivas, físicas, y mejor consideradas socialmente. En las imágenes de algunas revistas profesionales de Educación Física y Deporte la mujer participa en actividades expresivas o estéticas y rechaza la agresividad y el contacto físico, además el alto rendimiento es un coto masculino (Hernández y col. 1993) En esta misma línea y a partir de los datos extraídos de la presente investigación a partir de las imágenes editadas por Paidotribo se puede indicar que las mujeres aparecen más desvinculadas del deporte que los hombres y se centran en otras actividades de tipo no deportivo. Los hombres practican deportes de un modo mayoritario y es raro encontrarlos conectados con otras prácticas. Al mismo tiempo, el hombre aparece relacionado con la élite deportiva en más del 80% de las fotografías y la mujer no suele aparecer en prácticas de alto rendimiento. En las imágenes divulgadas por Paidotribo los sujetos de razas diferentes a la blanca, ya sea de forma individual o con individuos de su misma raza, practican deportes individuales. Un caso concreto es el de los sujetos de raza negra que se les vincula casi exclusivamente con el atletismo. Cuando estas personas practican actividad física conjuntamente con sujetos de raza blanca entonces los deportes colectivos son los más habituales. En todo caso, siempre se relacionan con el deporte y la competición, quedando excluidos de las prácticas no deportivas y de los ámbitos recreativos o educativos. Por lo tanto, tal y como ocurre en las imágenes fijas analizadas por Cristina López en su tesis doctoral (2005), las personas de razas diferentes a la blanca aparecen estigmatizadas.

4. Conclusiones.

Las imágenes de los libros de texto analizados representan mayoritariamente un modelo de cuerpo masculino, joven, de raza blanca, cuya tipología corporal es una “combinación” de diferentes somatotipos y que viste indumentaria deportiva. Las fotografías publicadas por Paidotribo asocian de forma significativa al hombre con los deportes y con la élite deportiva; y a la mujer con otro tipo de prácticas no deportivas y la alejan del alto rendimiento. La presencia de individuos de “otras” razas diferentes a la blanca es insuficiente en las imágenes de las dos editoriales analizadas en base a razones de interculturalidad. En los libros de la editorial Paidotribo los sujetos de razas diferentes a la blanca se vinculan casi exclusivamente con el deporte y con la competición y no con otro tipo de actividades físicas ni en otros ámbitos como el educativo. Del análisis de estos libros de texto se desprende la importancia de darle continuidad a la investigación ampliando la muestra utilizada para conocer con mayor exactitud la situación de los materiales curriculares dentro del área de Educación Física. Por su parte, las editoriales deben involucrarse en la mejora continua de los libros de texto que se elaboran y la Administración educativa en la supervisión de aquellos que se emplean en los distintos centros educativos. Finalmente, el docente no debe recurrir a los libros de texto sin un análisis crítico y reflexivo previo. La sensatez en base a criterios educativos previamente establecidos es imprescindible en el uso de este recurso didáctico.