Consideraciones a tener en cuenta en la programacion de actividades acuaticas para bebes enrelación con la temperatura
“Consideraciones a tener en cuenta en la programación de actividades acuáticas para bebes en relación con la temperatura”
RESUMEN COMUNICACIÓN/PÓSTER
Los programas de actividad acuática para bebes cada vez son mas demandados estudiados por todos los beneficios que aportan en edades tempranas. Pero es necesario tener en cuenta una serie de consideraciones a la hora de realizar y poner en marcha estos programas acuáticos, tener en cuenta las características individuales de los bebes influirá en el tipo de actividad a realizar, así como los factores ambientales, entorno y temperatura.
Son muchas las instalaciones que imparten estas actividades físicas en el agua para edades tempranas pero Explicar cual de ellas es mas adecuada y aconsejable para llevar a cabo estos programas para bebes en el medio acuático será clave para elaborar una guía para educadores acuáticos y padres, valorando así la importancia que tiene el entorno acuático y sus factores ambientales siendo la temperatura un factor clave en todo el proceso.
1. Introducción.
Los programas de actividad física para bebes en el medio acuático son cada vez más demandadas por los beneficios que aportan a los más pequeños tanto a nivel socio-afectivo, intelectual, motor, fisiológico… Cada vez son más y más los estudios (Camus, 1993; Conde 1997; Guerrero, 1991; Ahr, 1994, Pansu, 2010) los que nos aportan grandes conocimientos de cómo debemos aprovechar al máximo las posibilidades que nos ofrece el medio acuático en edades tempranas. Entenderemos los programas de actividad acuática para bebes como un comportamiento adaptativo al medio acuático (Camus, 1993), pero, nunca como una familiarización a las habilidades específicas natatorias.
El medio acuático nos tiene que servir para desarrollar y vivenciar el mayor número posible de experiencias en estas edades tempranas en el que el grado de asimilación a los nuevos estímulos es más rápida. Pero, ¿tenemos en cuenta las propiedades físicas que tiene el agua así como sus efectos en nuestros programas de actividades acuáticas para bebes?, ¿saben los padres cuál es la instalación más adecuada para la realización de estos programas de actividad acuática para bebes?, ¿qué tipo de instalaciones ofrecen actividad acuática para bebes?… Muchas son las cuestiones, pero mi labor como educadora acuática es intentar dar respuesta a ellas desde una revisión bibliográfica, en la que son muchos los datos, los textos, las comunicaciones e investigaciones a cerca de la actividad acuática para bebes.
2. Objetivos.
El interés y objetivo que me planteo al realizar esta comunicación es la de EXPLICAR en qué tipo de instalaciones acuáticas es más adecuado y aconsejable realizar y llevar a cabo estos programas de actividad acuática para edades tempranas y cuáles son las principales consideraciones a tener en cuenta para una optimización de estos programas, sobre todo atendiendo a los factores ambientales y el entorno (agua, temperatura…)
El objetivo general de este trabajo es VALORAR la importancia que tiene el entorno acuático y sus factores ambientales con relación a las características del individuo que participa en los programas de actividades acuáticas, en este caso bebes y las tareas, destrezas y habilidades que realiza en el medio, para conseguir una buena optimización de estos. OBTENER un mayor conocimiento sobre las consideraciones a tener en cuenta en la realización de programas acuáticos para bebes, atendiendo a las características de los sujetos implicados y el tipo de actividad dependiendo de la instalación acuática en la que se lleve a cabo puede variar, siendo un dato muy importante para un mayor o menor éxito de la actividad.
3. Fundamentación Teórica. Marco Teórico.
La creciente demanda de centros deportivos – Wellness, y otros; en zonas urbanas de nuestras provincias pone de manifiesto el gran interés por los adultos de la salud a través del agua, beneficiándose así de todas sus propiedades ya desde las primeras edades en la planificación de actividades físicas para poblaciones especiales como son los programas de actividad acuática para bebes.
El medio acuático entendido como un gran espacio de trabajo nos aporta diversidad y diferencias en los tipos de vasos acuáticos e instalaciones en las que podemos instaurar estos programas de actividad física acuática. Son muchas las clasificaciones que hay de los diferentes tipos de piscinas o vasos acuáticos, estos se pueden agrupar atendiendo a diferentes criterios y es así como (Rodríguez, 2007) los clasifica según la función o uso principal para lo que están destinados: deportivos o convencionales aquellos que son utilizados para realizar competiciones oficiales y sus características las regula la R.F.E.N; polivalentes aquellos que buscan dar cabida al mayor número posible de actividades y programas acuáticos; recreativos aquellos para el uso y disfrute de todos mayores y pequeños; enseñanza aquellos que su fin es el de realizar actividades educativas y poder adquirir una buena familiarización en el medio; chapoteo o infantiles aquellos que son utilizados para el juego y diversión de los más pequeños; y por último, foso de saltos aquellos en el que su uso es exclusivo para la competición y entrenamiento de estos o para el recreo.
Según estas clasificaciones y atendiendo al fin de uso del vaso acuático propondré mi propia clasificación, la cual me servirá para elaborar un cuadro resumen con ventajas, inconvenientes, temperaturas, actividades adaptaciones…, pero antes de nada desarrollaré el punto de partida de esta comunicación: “Las Consideraciones a tener en cuenta en la programación de actividades acuáticas para bebes (en relación con la temperatura)”.
CONSIDERACIONES A TENER EN CUENTA EN LA PROGRAMACIÓN DE ACTIVIDADES PARA BEBES SEGÚN LOS TIPOS DE VASOS ACUATICOS.
TABLA 1
Newell (1986) ya propone una serie de consideraciones a tener en cuenta en la coordinación y control de los movimientos, siendo en primer lugar la importancia de las características del individuo, seguidamente del tipo de actividad que realiza en un entorno con unos factores ambientales ya determinados. Estas consideraciones serán principalmente mi punto de partida a la hora de realizar y proponer cualquier programa para bebes en el medio acuático, sin olvidar muchas otras que también importan y son fundamentales en cualquier programación de actividad acuática como pueden ser: la seguridad, el número de niños (ratios), la duración de la sesión, el papel de los padres y educadores acuáticos. Cada uno de estos factores mantienen una estrecha relación entre ellos, ninguno es excluyente, por lo que tenemos que buscar el equilibrio entre ellos.
Por ejemplo: un nadador muy fibroso, en una piscina de competición, realizando un entrenamiento, es muy probable que sienta frío, por lo que la duración del entrenamiento lo tendrá que tener en cuenta el entrenador o monitor de natación.
CONSIDERACIONES A TENER EN CUENTA EN LA PROGRAMACIÓN DE ACTIVIDADES ACUATICAS PARA BEBES. En relación con la temperatura.
1. Características de los individuos:
Las características de los individuos que participan en los programas de actividad acuática son fundamentales y debemos tenerlas en cuenta, sobre todo a nivel fisiológico – corporal, ya que la composición del cuerpo, la masa, el tejido adiposo, el área de piel…, son factores que determinarán como percibimos y sentimos la temperatura del agua, encontrando claras diferencias como pueden ser que un bebe a diferencia de un adulto posee una piel menos gruesa, tiene una red capilar subcutánea más densa, dispone de escasos mecanismos de defensa, así como pocas reservas gluco-lípidicas haciendo que estos factores influyan en la pérdida del calor y dificulte su adaptación al frío
BEBES
La principal característica de los bebes, hace referencia a su composición corporal, en la que su gran cantidad de tejido adiposo, su baja osificación y desarrollo muscular hace que tengan una buena flotación en aguas cálidas y le ayuda a relajarse. Su sistema articular laxo, así como su piel suave y sin bello le ayudan a desplazarse y realizar movimientos de brazos y piernas espontáneos con o sin ayudas
2. Tipo de Actividad que realizamos:
El tipo de actividad que realizamos en el medio acuático atendiendo a la intensidad de la actividad así como la orientación del cuerpo en el agua o la cantidad de superficie corporal expuesta al aire o sumergida, hace que sean unos de los factores potenciales que influyen en como sentimos y percibimos la temperatura del agua.
PROGRAMAS DE ACTIVIDAD ACUATICA PARA BEBES Estos programas acuáticos para bebes hacen que se diviertan al mismo tiempo que adquieren habilidades en el medio acuático (American Academy of Pediatrics, 2000), esta Educación Acuática entendida como “proceso de desarrollo en un medio singular por sus propiedades, el agua, y que a través de la interacción cooperativa que se establece en las primeras etapas entre papas, bebes y educador, basada en una comunicación verbal, cinestésica – táctil y afectiva, favorecen al desarrollo integral del individuo” (Conde, 1997)
Muchos son los beneficios y ventajas; un mayor dominio psicomotor a nivel físico contribuye a un incremento paulatino de su fuerza y sistema cardiovascular, favoreciendo el desarrollo armónico de su cuerpo, así como, su bienestar tanto a nivel social y psicológico. (Camus, 1993; Conde, 1997; Guerrero, 1991) Las actividades acuáticas para bebes se orientan a edades comprendidas entre los 3 y 24 meses según Guerrero (1991), otros como (Barbany, 2007) diferencia etapas de adaptación (0 a 6 meses), iniciación de (6 a 12 meses), desarrollo de (12 a 24 meses) y de autonomía de (24 a 36 meses) y aunque siempre es conveniente consultar al pediatra es importante conocer el tipo de instalación así como las condiciones de higiene, temperaturas, sistemas de ventilación de la misma.
3. Entorno – Factores Ambientales:
Los factores que determinaran como percibimos y sentimos la temperatura del agua son aquellos que hacen referencia a nuestro entorno como es la temperatura absoluta del aire, la humedad relativa del aire. Aumentando estos, podemos conseguir que la percepción de la temperatura del agua cambie radicalmente.
AGUA Y TEMPERATURA
Una de las propiedades físicas del agua es su principio térmico; el agua como conductor y transmisor de calor entre el cuerpo y la temperatura del agua, muy importante en las actividades acuáticas. Son numerosos los factores que confluyen en relación directa con el agua: la temperatura del agua, se sitúa en torno a los 24º de mínima a los 28º de máxima permitida (reglamento higiénico-sanitario sobre piscinas de uso colectivo en las diferentes comunidades autónomas).
En la práctica, la temperatura del agua deberá adecuarse al tipo de actividad y a las características de los usuarios. Se llegan a establecer diferentes valores de temperatura atendiendo a la actividad: terapéutica (30º), programas utilitarios (29º-30º), programas de mantenimiento, recreativas o libres (28-29º) y programas de entrenamiento y competición (25º-26º). Con población infantil los requerimientos de la temperatura serán mayores, (Rodríguez, 2007) La temperatura ambiental, oscilará entre los 2º superior a la temperatura del agua, normalmente, habiendo diferencia de 4º dependiendo de las comunidades autónomas.
Y por último, la humedad relativa, la evaporación del agua y la carga de productos químicos tenderá a incrementar la humedad relativa de ahí la importancia de aportar aire seco para evitar un aumento descontrolado de esta, sin superar los límites permitidos por la normativa vigente según las diferentes comunidades autónomas de 60-70 %. La mayoría de autores defenderán la importancia de una elevada temperatura (27º y 32º) del agua en las instalaciones acuáticas en las que tienen lugar actividades acuáticas para bebes (Conde, 1997; Guerrero, 1991; Ahr, 1994; Pansu, 2010).
Lo recomendable es trabajar con temperaturas (31º – 33º) que permitan al organismo mantener su temperatura corporal sin activar sus sistemas de termorregulación. Esto es así porque influyen en razones fisiológicas-corporales, y debemos tener claro que el bebe no es capaz de adaptarse al frio como un adulto. Estos son algunos de los efectos que produce el agua caliente y fría sobre el organismo de los bebes. Un agua caliente (31º- 34º) produce una vasodilatación y disminución del tono muscular y nos aseguramos de que no se produce una pérdida de calor corporal haciendo de la actividad sea confortable y relajada.
Podremos observar que los movimientos coordinativos serán más fluidos y la concentración será mayor, siendo esto un punto clave en la progresión de los programas acuáticos para bebes. Un agua fría (16º – 23º) por el contrario provocara una vasoconstricción e hipertonía muscular, siendo la actividad incomoda y poco confortable para los bebes.
4. Otras consideraciones básicas y muy importantes en la programación de actividades acuáticas para bebes: seguridad, duración de la sesión, número de niños (ratios), función de los padres, función del educador acuático. (Muyor,2004)
4. Material y Métodos.
Este trabajo está elaborado a partir de una revisión bibliográfica, así como en las observaciones diarias del ámbito laboral en el que trabajo como educadora acuática surgiendo así esta inquietud por las consideraciones que se deben tener en cuenta a la hora de llevar a cabo programas de actividad acuática para bebes en relación con la temperatura. La búsqueda en bases de datos específicas, así como la biblioteca de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la Universidad de León, sirvió para extraer documentación (revistas, libros) que da cuerpo y rigor a la fundamentación teórica. Los softwares utilizados han sido: internet Explorer y Microsoft Word.
5. Resultados y Discusión.
Uno de los principales inconvenientes que siempre surgen en los programas de actividad acuática para bebes es que la temperatura del agua esta fría (27’2º C aproximadamente), los bebes mas delgaditos empiezan a temblar, se ponen cianóticos y a los 15-20 minutos tienen que abandonar la actividad. De esto la relación estrecha que guarda el tipo de actividad, con el entorno y las características de los individuos. La fisiología y composición del cuerpo de los sujetos llegara a determinar la sensación térmica del agua De esto, la propuesta en que tipos de vasos es más conveniente y favorable realizar los programas de actividad acuática para bebes, teniendo en cuenta una serie de consideraciones (entorno, factores ambientales, duración, ventajas, inconvenientes, adaptaciones…), ya que en muchas de las ocasiones se utilizan vasos acuáticos de competición (deportivos o convencionales) poco apropiados para este tipo de actividad física acuática.
CONSIDERACIONES A TENER EN CUENTA EN LA PROGRAMACIÓN DE ACTIVIDADES PARA BEBES SEGÚN LOS TIPOS DE VASOS ACUATICOS.
TABLA 1 Tras el análisis comparativo de estas tablas, podemos ver que se dan elementos comunes en un tipo de vaso y otros. Lo que no podemos cambiar es que la experiencia acuática siempre sea planteada desde un punto de vista educativo y no utiltario, donde el vivenciar las habilidades y tareas sean seguras para los más pequeños y sus acompañantes. Educar en la prevención y seguridad en el medio acuático ha de ser uno de nuestros objetivos fundamentales, fomentar la seguridad subjetiva de los padres es primordial en el proceso de enseñanza aprendizaje de sus hijos, ya que si se muestran relajados y positivos él bebe se sentirá mas cómodo y seguro en su apego con mamá y papá. Muchas son las tareas que debe realizar el educar acuático pero provocar sensaciones positivas con un trato humano, un tono de voz, una mirada y un contacto corporal combinado con las técnicas de enseñanza adecuadas a los diferentes niveles madurativos de los bebes, creará una buena atmosfera de trabajo y un éxito en los programas.
Tabla 1. Consideraciones a tener en cuenta en la programacion de actividades acuaticas para bebes enrelación con la temperatura
Conclusiones
Las condiciones ambientales que debe tener una instalación acuática para que estas sean confortables y agradables es una labor compleja. Como ya he ido desarrollando hay que tener en cuenta innumerables factores, como pueden ser parámetros objetivos que hacen referencia a la temperatura ambiental del aire, la humedad relativa del entorno; y otros quizás más subjetivos como son el tipo de actividad que realizamos en la instalación, las características individuales de los usuarios que acuden a la actividad…, los cuales como ya he dicho guardan una estrecha relación entre ellos y no son excluyentes.
Como conclusión me gustaría dar respuesta a la siguiente cuestión que puede ser de guía útil tanto para padres que muestran interés por realizar actividad física en el medio acuático con sus hijos, así como a educadores acuáticos a la hora de llevar a cabo sus programas de actividad acuática para bebes teniendo en cuenta la importancia de la temperatura en todo el proceso.
¿A qué tipo de instalación acudir a realizar actividad acuática para bebes? Y sobre todo; ¿Cuál es más aconsejable y beneficiosa?
Aquella que tenga en cuenta las características del usuario (bebe), el tipo de práctica acorde con las necesidades y evolución del mismo, sin olvidar el entorno y la relación con los factores ambientales.
Esta instalación solo puede ser el tipo de piscina denominado vaso acuático saludable. Los adultos atrapados en una sociedad de ritmo trepidante, buscan en la actividad acuática para bebes un espacio de tiempo para el bienestar físico, el aprovechamiento del tiempo de ocio así como la adquisición de hábitos saludables en compañía de sus hijos.
La creciente demanda de estos centros en nuestra población hace que se nos habrá una puerta a la implantación de estos programas de actividad acuática para bebes, en la que las condiciones del entorno son muy favorables ya que trabajan con temperaturas muy cálidas como mecanismo para diversos tratamientos. Esto hace que la adaptación al medio en edades tempranas sea favorable y enriquecedora observando como la estimulación y su progreso es más rápido en vasos acuáticos con aguas calientes que con aguas frías, como ya defendían autores como (Conde, 1997; Guerrero, 1991; Ahr, 1994; Pansu 2010).
Esto es así por mi evidencia como profesional en el sector que llevo a cabo programas de actividad acuática para bebes en piscinas saludables (único programas en balneario urbano de la ciudad de León) y piscinas polivalentes.
De todo esto mi interés por defender el trabajo e implantación como profesional de estos programas en estos centros terapéuticos que parten de aguas calientes como método para sus tratamientos y reportan innumerables beneficios a todos sus usuarios.
Para finalizar, sería conveniente realizar una revisión de la normativa vigente en cuanto a los valores máximos actuales permitidos de temperatura del agua y los idóneos para una actividad, características y entorno determinado, ya que siempre es tema de debate y conflicto de muchos de los usuarios de los programas de actividad acuática, para poder ajustarlos así a los diferentes programas acuáticos que necesitan de una mayor exigencia.
En esta revisión de normativa tendremos que manejar los límites higiénico-saludables más convenientes y saludables para todo tipo de usuarios utilizando tratamientos del agua adecuados. Por ejemplo el ozono nos proporciona un agua más limpia, y saludable ayudándonos a respirar mejor ya que el ambiente no tiene elementos halogenados como los que producen otro tipo de tratamientos.
A continuación propongo una solución al alcance de cualquier instalación acuática sin elevados costes en cuanto a la problemática que surge en los programas de actividad acuática para bebes en relación con la temperatura del agua e instalación (entorno).
Ejemplo de la modificación de los factores ambientales de la instalación: ¿Qué hacer? Sistemas para aumentar la temperatura del agua
Los sistemas para aumentar la temperatura del agua pueden ser diversos desde calderas de gas o eléctricas, calentadores eléctricos fáciles de instalar sobre el circuito de filtración de la piscina, pero de un alto coste de consumo eléctrico, otros como la calefacción solar tiene muy buena relación coste – eficacia, aunque se parta de una inversión elevada luego el mantenimiento es bajo, y se debe fomentar las energías renovables.
Esto no nos compete, ya que los gestores de la instalación con sus encargados de mantenimiento deben regular y tener en cuenta el gasto y los diferentes sistemas de calentamiento del agua, lo que si podemos explicarlos es un método fácil para percibir más o menos agradable la temperatura del agua. Consiste en aumentar la temperatura ambiental 5 o más grados dos horas antes de que los bebes acudan a la instalación, los padres sentían el agua más cálida y confortable y estaban muy agradecidos por ello; no tanto los socorristas, los cuales sentían una elevada humedad relativa y excesiva temperatura ambiental. Esto mismo es lo que ocurre en verano, cuando hay una elevada temperatura ambiental y humedad nuestro organismo percibe calor y al entrar al agua es más agradable y confortable.
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