Análisis del tenis femenino federado
Resumen análisis del tenis femenino
El incremento espectacular y la creciente incorporación de la mujer al mundo del deporte es un hecho incuestionable, influenciado principalmente por la emergencia de una cultura deportiva femenina y por cambios en las estructuras organizativas del sistema deportivo. El objetivo, por ello, de la presente comunicación, es profundizar en una realidad deportiva concreta como es el tenis deportivo federado en España, una de las primeras prácticas deportivas a las que tiene acceso la mujer en el deporte español, para conocer cuál ha sido esta evolución y cuál es la situación actual. Fundamentándonos, en los datos obtenidos de la Real Federación Española de Tenis así como del Consejo Superior de Deportes, contextualizándolos en función con hechos histórico y contrastándolos con fuentes bibliográficas de diversa índole, se reflejará la evolución en los últimos cinco de esta modalidad deportiva en función de variables: año y categoría de edad, comparando los mismos con el tenis masculino federado, la media nacional y referencias de otros deportes. Los resultados demuestran que aumentando el número de licencias, se mantienen los porcentajes de participación con pequeñas fluctuaciones y son muchos los factores que influyen a la hora de determinar la participación femenina en el deporte y, concretamente en el tenis. Conocer y profundizar en ellos nos permitirá determinar las razones que motivan a la práctica deportiva, fomentar la misma, prevenir el abandono e intervenir directa o indirectamente a través de diferentes profesionales desde una perspectiva multidisciplinar para su mejora.
1. Introducción o fundamentación teórica
El incremento espectacular y la creciente incorporación de la mujer al mundo del deporte a lo largo del siglo XX y XXI es un hecho incuestionable. Algunos ejemplos son el aumento del índice de práctica deportiva de la población femenina en España, un 30% de mujeres practica uno o más deportes (García Ferrando, 2001), más de un 40% de participación femenina en las Olimpiadas de Atenas 2004, 4.412 mujeres frente a los 6.452 hombres, o la continua incorporación de la mujer a los órganos de gobierno de los diversos Organismos e Instituciones del ámbito deportivo (Robles y Escobar, 2006). Los índices de participación, a pesar del anteriormente citado incremento de las mujeres en el deporte, siguen siendo siempre son mayores en hombres que en mujeres (Puig, 2001 y García Ferrando, 2001). Por tradición, al deporte se le asocian valores considerados masculinos: competir, ser mejor, fuerza, potencia, tener éxito, entre otros, razones por las que muchas mujeres si no han tenido educación deportiva no se sienten atraídas por ello (Puig, 2001). Igualmente, desde sus orígenes, el deporte moderno, es una actividad física más propia del género masculino, no siendo un mundo de mujeres y, donde los hombres no toleraban la presencia de las mismas (Mosquera y Puig, 2002), existiendo igualmente un rechazo social en el deporte de alto nivel en relación a la práctica de ciertos deportes por parte de las mujeres (Puig, 2001). La historia del deporte femenino, a diferencia del masculino, comienza con las reivindicaciones de las mujeres por acceder al mismo (Mosquera y Puig, 2002). Siendo los aspectos más influyentes en la misma la emergencia de una cultura deportiva femenina y las transformaciones que se han producido en las estructuras organizativas del sistema deportivo. La cultura deportiva femenina, surge de esta forma a lo largo del siglo XXI gracias los siguientes procesos (Puig, 2000): 1) proceso de individualización de las sociedades avanzadas que deriva en el proceso de individualización del género, 2) paso de sociedad industrializada a sociedad de servicios que exige unas competencias de mano de obra que se asemejan al quehacer femenino y conlleva una incorporación de la mujer a diferentes ámbitos sociales y laborales y, 3) el movimiento feminista que ha posibilitado una toma de conciencia en las mujeres y que plantea diferentes estrategias de actuación. En España, la incorporación de la mujer al deporte es fluctuante y desigual. Pudiéndose concretar y sintetizar las siguientes etapas en el deporte femenino español (Mosquera y Puig, 2002): – Inicio durante la II República de la mujer a la práctica de tenis, natación, excursionismo, atletismo y hasta el fútbol, caracterizado por ser un momento liberalizador donde los niveles de tolerancia son mayores y se comienza la difusión del deporte entre la clase trabajadora merced de la creación de clubes, entre otros. – Freno de las iniciativas en el Franquismo, encomendándose el deporte a la Sección femenina y reduciéndose las prácticas deportivas a aquellas que no estuvieran en contradicción con lo que se consideraba femenino: elegancia, flexibilidad, belleza. – Eliminación de toda restricción a la práctica deportiva de cualquier deporte por parte de las mujeres e incremento de los comportamientos deportivos desde la transición democrática, años posteriores y hasta la actualidad. Bajo este contexto, considerando el tenis una de las primeras práctica a la que acceden las mujeres en España, teniendo en cuenta la importancia y atractivo que la misma tiene así como la evolución y situación actual en la que nos encontramos (éxitos y resultados deportivos, tenistas destacadas). El objetivo de la presente comunicación es profundizar en una realidad deportiva concreta como es el tenis deportivo femenino federado en España, mostrando su evolución y su situación actual. Concretamente: 1. Mostrar cuál ha sido la evolución en los últimos seis años, del 2000 al 2006, del tenis federado en función del número de licencias de la Real Federación Española de Tenis (RFET). 2. Comparar la situación del tenis femenino con el masculino en ese período y comparar los resultados con la media nacional. 3. Profundizar en la realidad deportiva del tenis femenino federado, en relación principalmente a la variable categoría de edad.
2. Material y método
La metodología utilizada se centra principalmente, en el análisis descriptivo de los datos oficiales obtenidos de la Real Federación Española de Tenis así como del Consejo Superior de Deportes relativo al número de licencias desde el año 2000 hasta la actualidad. Las tablas, estadísticos y gráficos obtenidos resultarán del cruce de las variables: modalidad deportiva (tenis y otras modalidades a nivel nacional), año de práctica (de 2000 a 2006), categoría de edad (alevín, infantil, cadete, junior, senior y ATP/APE) y género (masculino o femenino). Finalmente, para contextualizar los resultados obtenidos se tomarán de referencia eventos deportivos, resultados y tenistas relevantes del momento, así como las fuentes bibliográficas referenciadas.
3. Resultados
Los resultados obtenidos en relación a cada uno de los tres objetivos planteados anteriormente quedarían de la siguiente forma: 1- Evolución del número de licencias del 2000 al 2006 del tenis deportivo federado según datos de la Real Federación Española de Tenis (RFET):
GRÁFICO 1: Evolución del número de licencias del tenis federado (RFET, 2007).
El número de licencias de tenis desde el 2000 al 2006 se incrementa notablemente en un 22,23% pasando de 84.185 a 102.900. La evolución no es constante, teniendo valores negativos del 2001 al 2002 y del 2003 al 2004 y coincidiendo el período de mayor incremento de 2002 a 2003. Tal como se reflejada en el gráfico de la derecha.
2.- Evolución y situación actual del tenis femenino federado en relación al masculino y la media nacional:
GRÁFICO 2: Evolución del número de licencia a nivel nacional de tenis federado totales, por género y en relación a la media nacional (RFET, 2007).
En relación al género, destacamos unaevolución similar en hombres que en mujeres, en cuanto al aumento y dismunición de las mismas, siguiendo la misma tendencia que la mostradacon las licencias totales. De 2001 a 2002 y de 2003 a 2004 se produce una disminución del número de licencias (masculinas y femeninas), produciéndose el mayor incremento se de 2002 a 2003 y aumentando de forma constante del 2004 hasta la actualidad.
TABLA 1: Incremento anual del número de licencias de la RFET por género.
Por otro lado, el porcentaje del incremento total del número de licencias de 2000 a 2006 es muy similar, 19,07% en licencias masculinas y 16,08% en femeninas, respetándose de esta forma la distribución en cuanto al género del total de licencias existentes en cada año. Un 30,2 % de media de licencias femeninas durante los 6 años analizados y un 69,8% masculinas.
GRÁFICO 3: Evolución del porcentaje de licencias masculinas y femeninas de la RFET (RFET, 2007).
Comparando los datos con la media nacional y diferenciándolos también por género, se observa que el número de licencias en tenis está por encima de la media nacional en ambas variables: cifras totales y género.
GRÁFICO 3: Evolución del número de licencia de tenis federado y nacionales totales, por género (RFET, 2007 y CSD, 2007).
3.- Tenis femenino federado por categoría de edad: Profundizando en el tenis femenino, podemos destacar que según la categoría de edad, la media el número medio de licencias en cada una de las categorías desde el 2000 al 2006 es muy diferente, disminuyendo las mismas desde “alevín” y hasta “junior” en ambos géneros y siendo en la categoría “senior” donde se acumula el mayor número de licencias. Las cifras quedarían de la siguiente forma (F = femenino, M= masculino):
Gráficamente, la media por categoría de edad y en función del género sería la siguiente:
Diferenciando los resultados cronológicamente, se muestra un incremento en todas las categorías desde el 2000 al 2006 con algunas disminuciones del 2001 a 2002 y 2003 a 2004. Respetándose el mayor incremento entre 2002 y 2003. Por otro lado, la categoría que menor número de licencia presenta es A.P.E., seguida de Junior, Cadete, Intantil, Alevín y Senior.
GRÁFICO 5, GRÁFICO 6., GRÁFICO 7.
4. Discusión y conclusiones
Siguiendo la misma estructura establecida hasta el momento en relación a los tres objetivos de la presente comunicación marcados en la introducción. Destacamos las siguientes conclusiones:
GRÁFICO 8.
1.- La evolución del número de licencias del 2000 al 2006 del tenis deportivo federado según datos de la Real Federación Española de Tenis (RFET) sigue una tendencia similar a la nacional en cuanto a que se produce un incremento desde el 2000 al 2006 pero supera en cifras a la media nacional en cuanto al número de licencias se refiere. Afirmamos de esta forma que el tenis es uno de los deportes prácticados por un número elevado de población española. Según Mosquera y Puig (2001) citando a García Ferrando, el tenis ocupa el sexto lugar de deporte más practicado por los españoles, sean hombres o mujeres. Entre las razones que justifican la fluctuación del número de licencias, sobre todo el aumento de participación del 2002 a 2003 y del 2004 en adelante hasta el 2006, incluímos el éxito de deportistas de ámbito nacional que funcionan como modelos sociales impulsando la práctica deportiva. Por ejemplo, en términos de temporalidad destacamos en relación a las fechas anteriormente señaladas, entre otros, la proximidad de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 o la posterior consecución de la medalla de plata en dobles de Conchita Martínez y Virginia Ruano en la citada competición. 2.- Diferenciando por género, existe una superioridad del número de licencias del tenis masculino sobre el femenino, siguiendo igualmente la misma tendencia que a nivel nacional. Contrastando los resultados con los obtenidos del CSD (2007), desde 1983 hasta la actualidad, el número de licencias de hombres ha sido siempre superior al de mujeres, siendo la media desde el 2000 al 2005 de un 17% femeninas y un 71% masculinas, el 12% restante son licencias sin discriminar, tal como ocurre en el tenis deportivo federado (30,2% de licencias femeninas frente al 69,8% de licencias masculinas).
GRÁFICO 8,GRÁFICO 9.
En función del tipo de deporte practicado, destacamos que el tenis, a parte de mantener el porcentaje de la proporción licencias masculinas – femeninas de 70 y 30%, se encuentra junto con un amplio número de deportes que mantienen esta misma distribución. Los datos del 2005, muy similares a años anteriores destacando los siguientes porcentajes y distribución: • Desportes donde la participación es superior en mujeres que en hombres, aproximadamente entre un 50 y 66 % de licencias femeninas: Voleibol (34% de licencias masculinas frente a 66% femeninas), Gimnasia:(16% masculinas frente a 55% femeninas y 29 % sin discriminar) e Hípica (42% masculinas, 51% femeninas y 7% sin discriminar. • Deportes donde la participación es aproximadamente entre un 30 a 40 % femenina: balonmano, golf, salvamento y socorrismo, esquí náutico, padel, baloncesto, piragüismo, orientación, dep. discapacitados intelect., esgrima, atletismo, dep. paralíticos cerebrales, badminton, patinaje, natación y tenis. • Deportes donde la participación es aproximadamente entre un 12 a 27 % femenina: polo, pentatlon moderno, dep. para sordos, karate, judo, remo, petanca, tiro con arco, dep. para ciegos, béisbol y sófbol, surf, taekwondo, espeleología, montaña y escalada, vela, squash, deportes para minusválidos físicos, triatlon y luchas olímpicas. • Deportes donde la participación es del 0 al 11% femenina y 89 – 100% masculina: caza, motociclismo, aeronáutica, pelota, ciclismo, billar, fútbol americano, deportes de invierno, colombófila, fútbol, boxeo, actividades subacuáticas, motonáutica, bolos, colombicultura, rugby, tiro olímpico, pesca y casting, tiro a vuelo, ajedrez, galgos, automovilismo, hockey, tenis de mesa, halterofilia, kickboxing. Estos porcentajes se refieren exclusivamente a la práctica federada, destacando que existe un interés generalizado de los hombres por el deporte competido especialmente asociado a poseer licencia federativa o pertenencia a un club deportivo y que si analizamos el ámbito no competitivo los resultados se invertirían. (Mosquera y Puig, 2001). Además, en el tenis, son muchos los practicantes que dedicando su tiempo libre a la práctica de esta modalidad deportiva no poseen licencia en vigor. 3.- Por último, en cuanto al factor edad, destacamos que se mantienen las diferencias entre género, siendo los índices de participación femenina inferiores a los masculinos y similares a la media nacional. Algunos aspectos destacados serían: – En la adolescencia hay una tendencia similar dentro de cada género y desigual entre hombres y mujeres. Los índices participación, a pesar que se incrementa en términos absolutos, son variables año a año, disminuyendo desde las categorías alevín y hasta infantil. La superposición de la práctica deportiva con el ámbito académico – formativo o personal, condicionando a ambos de manera decisiva las posibilidades de la continuación en el deporte y explicando de manera significativa la alta tasa de abandono del mismo en esta etapa. Por otro lado, la exposición corporal en esta etapa condicionan la participación femenina, aunque ésta haya ido evolucionando en los últimos años de manera progresiva y constante y se hayan ido igualando y normalizando los roles sociales respecto a la incorporación de la mujer en el deporte. – La superioridad de la categoría Senior quedaría justificada por la necesidad de poseer licencia federativa para competir en todo aquel campeonato organizado y la obtención de premios en metálico en los mismos como incentivo para la participación. – La inferioridad, por contrapartida de la “APE” por la minoría de individuos que se mantienen en esta categoría. Concluyendo, pesar de un incremento espectacular y una creciente implicación de la mujer en el ámbito deportivo federado, por tradición y todavía en la actualidad, los índices de participación siguen siendo mayores en hombres que en mujeres. Puntualmente, destacamos: 1. Innegable existencia de la aparición de una cultura deportiva femenina influenciado por: proceso de individualización de las sociedades avanzadas con la individualización del género, paso de una sociedad industrializada a una de servicios y movimiento feminista como principales procesos influyentes de la incorporación de la mujer al mundo del deporte (Puig, 2001) 2. Destacada pero tímida conquista de espacio deportivo por parte de la mujer en el tenis federado según análisis de los datos obtenidos del CS (2007) y RFET (2007) Existiendo un incremento constante del número de licencias, manteniéndose la desigualdad en los índices de participación entre géneros y respetándose los resultados de la media nacional. 3. Fluctuaciones en la evolución de la participación, derivadas, en términos de temporalidad, por resultados deportivos, éxito de deportistas destacados, entre otros que sirven de modelos sociales impulsando la práctica deportiva. 4. Existencia de un rechazo social en el deporte de alto nivel en relación a la práctica de ciertos deportes por parte de las mujeres, invirtiéndose los resultados en el ámbito no competitivo (Mosquera y Puig, 2001; Puig, 2001 y datos del CSD, 2007). 5. Influencia del factor categoría de edad en ambos géneros sobre todo el la etapa de la adolescencia por superposición de obligaciones académico – profesionales, entre otras. Superioridad del número de licencias en la categoría “senior” por motivos de obligatoriedad de poseer licencia para competir y existencia de premios en metálico para los ganadores, en contraposición con la inferioridad en la categoría “APE”. 6. Múltiples variables influyentes a la hora de determinar la participación femenina en el deporte y concretamente en el tenis federado. Finalmente, consideramos importante analizar otras modalidades deportivas desde el ámbito federativo de la misma forma que se muestra en este estudio para ampliar y comparar resultados, verificando la modificación o no de los hábitos y tendencias deportivas por género. Igualmente, contrastar los resultados con investigaciones relacionadas con el tema, permitirá conocer y profundizar en el deporte bajo cifras oficiales y desde diferentes puntos de vista, permitiendo conocer y profundizar en cada realidad deportiva en cuestión para conocer las razones que motivan a la práctica deportiva federada, permiten fomentar la misma y consiguen prevenir el abandono. Todo ello, con la finalidad de que diferentes profesionales intervengan directa o indirectamente desde una perspectiva multidisciplinar en la mejor del deporte.
Bibliografía
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