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29 May 2007

Los 5 errores más frecuentes en la técnica de judo ippon seoi nague: claves para su enseñanza.

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El propósito de este trabajo de investigación ha sido analizar los errores más frecuentes que cometen sujetos universitarios al realizar la proyección Ippon Seoi Nague. Para desarrollar el estudio se realizó un análisis videográfico -mediante el uso de la metodología observacional…

Autor(es): Dr. D. Alfonso Gutiérrez Santiago *, D. Iván Prieto Lage**
Entidades(es): * Profesor de la Facultad de Ciencias de la Educación y del Deporte de Pontevedra (Universidad de Vigo). Doctor y Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte por la Universidad de León. ** Diplomado en Educación Física. Licenciado y Doctorando en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. Universidad de Vigo. Investigador de la Universidad de Vigo.
Congreso: III Congreso Nacional Ciencias del Deporte
Pontevedra – 29-31 de Marzo de 2007
ISBN:84-978-84-611-6031-0
Palabras claves: Judo, técnica, error, iniciación, Ippon Seoi Nague

Resumen los 5 errores más frecuentes en la técnica de judo ippon seoi nague

El propósito de este trabajo de investigación ha sido analizar los errores más frecuentes que cometen sujetos universitarios al realizar la proyección Ippon Seoi Nague. Para desarrollar el estudio se realizó un análisis videográfico -mediante el uso de la metodología observacional (Anguera, 1999)- de la ejecución técnica de 26 alumnos de la Facultad de Ciencias de la Educación y del Deporte de la Universidad de Vigo que cursaron la asignatura “Deportes de adversario con fines recreativos” durante un periodo aproximado de 4 meses. Los resultados, analizados mediante estadísticos descriptivos con el paquete de software SPSS 12.0.1, evidencian que la población estudia comete un gran número de errores diferentes, aunque sólo algunos de ellos se pueden considerar relevantes o significativos por su alta frecuencia de aparición. De este modo, se ha considerado que tanto la falta de una óptima flexión de rodillas en la fase de Tsukuri de la técnica, como la ejecución de una maniobra reequilibradora después de proyectar a Uke, son los errores más habituales.

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Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº3.

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1. INTRODUCCIÓN:

Dentro del ámbito del deporte, se entiende como técnica el “modelo ideal de un movimiento deportivo, definido por los conocimientos científicos y experiencias prácticas” (Grosser y Neumaier, 1986). La metodología utilizada por los entrenadores o maestros para que sus “pupilos” adquieran ese grado de perfección al que aspira todo deportista es, cuando menos, variable, y además ha ido evolucionando sustancialmente a lo largo de los años debido, entre otros factores, a la investigación en las ciencias del deporte. En los inicios de la práctica deportiva del judo, tal como señala González (1999), su enseñanza en Europa se llevaba a cabo a través de los expertos japoneses que utilizaban como única referencia de aprendizaje la demostración, preponderando, sobre otros sentidos, el visual; de tal manera que casi en ningún momento recurrían al uso del lenguaje o el feedback como una manera de complementar las imágenes visuales; debido a que, por un lado, éste era el sistema que utilizaban en su país, y, por otro, a las evidentes limitaciones con el idioma. A lo largo de las últimas décadas han salido a la luz diferentes publicaciones científicas donde se constata que el conocimiento del error es una herramienta útil para la optimización y aprendizaje de modelos técnicos deportivos (De Knoop, 1983; Gutiérrez, Vernetta y López Bedoya, 2006; Pieron, 1988; Vernetta y López Bedoya, 1998). En cualquier caso, en ningún momento, estas investigaciones han tenido al deporte del judo como objeto de estudio. Por este motivo, y tras un exhaustivo análisis de diferentes bases de datos y revistas especializadas en donde se evidencia este vacío conceptual, surge la necesidad de efectuar un estudio de estas características. El objetivo de este trabajo es, por tanto, analizar los errores más frecuentes que se producen en la ejecución de la técnica de proyección Ippon Seoi Nague, estableciendo una herramienta que pueda servir como soporte técnico en el proceso de enseñanza-aprendizaje desempeñado por los distintos profesionales del judo.

2. MATERIAL Y MÉTODO.

Este estudio se ha realizado en Pontevedra, concretamente en la Facultad de Ciencias de la Educación y del Deporte (Universidad de Vigo), utilizando para ello un tatami de 10×10 metros, ubicado en el Centro Gallego de Tecnificación Deportiva (C.G.T.D.) y en el pabellón universitario de dicha facultad. La muestra utilizada estuvo formada por alumnos universitarios, con edades comprendidas entre 21 y 30 años, de la asignatura “Deportes de adversario con fines recreativos” -4º de la Licenciatura en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte-, pertenecientes a los cursos académicos 2003/2004, 2004/2005 y 2005/2006, y que cumplían el requisito de ser neófitos en la disciplina deportiva del judo. Concretamente, para la técnica objeto de estudio -Ippon Seoi Nague-, la muestra final fue de 26 sujetos -12 hombres y 14 mujeres-. Asimismo, para este análisis observacional se ha filmado la ejecución técnica de dichos sujetos en la proyección señalada, recopilando los datos mediante una grabación con dos cámaras de vídeo digital (Samsung VP-D70 y Samsung VP-D301), utilizando en ambos casos un plano entero con un enfoque normal (Lomas, 1996). Las referidas cámaras se dispusieron sobre dos trípodes, a una altura de 1,50 metros, situadas en ángulo una enfrente de la otra y aproximadamente a 2 metros del tatami. Posteriormente se realizó una edición de las distintas proyecciones filmadas mediante el programa informático de edición de vídeo Pinnacle Studio 9.1.2. Además del sexo (variable independiente), la variable fundamental que hemos estudiado en esta investigación es el error técnico (variable dependiente), mediante una metodología de tipo observacional (Anguera, 1999); y en concreto, basándonos en las afirmaciones de Heinemann (2003), podemos manifestar que el tipo de observación llevada a cabo ha sido estandarizada, abierta y no participante. Posteriormente, se efectuó un visionado de los vídeos donde se analizó la técnica en cuestión, determinando y categorizando los distintos errores cometidos en su ejecución, así como la frecuencia de los mismos. Con el objetivo de validar y dotar del mayor rigor científico posible al estudio realizado, describiremos, a continuación, el modelo técnico que se ha utilizado en la enseñanza de la técnica de proyección y que, además, ha formado parte del proceso de elaboración del formato de campo con el que se ha efectuado la observación. Los modelos técnicos que ofrece la bibliografía específica difieren en ciertos aspectos; de ahí que, con el fin de distorsionar lo menos posible los resultados obtenidos, hayamos optado por uno de ellos en particular: concretamente, nos hemos basado, grosso modo, en las premisas que ofrecen Taira, Herguedas y Román (1992), autores cuyo prestigio en la doctrina de este deporte está más que reconocido. Técnica Ippon Seoi Nague (adaptado de Taira, Herguedas y Román, 1992). Ambos judokas, Tori y Uke, se encuentran uno frente al otro en posición natural con un agarre diestro. Tori, con su mano izquierda, agarra la manga derecha de Uke por encima del codo, y, con su mano derecha, agarra la solapa izquierda de Uke a la altura de su propio hombro, tirando, con ambas manos, del cuerpo de éste hacia delante para así efectuar un desequilibrio frontal y obligar a Uke a equilibrarse únicamente sobre los dedos de sus pies. A continuación, Tori coloca su brazo derecho bajo la axila derecha de su oponente, controlando dicho brazo con una fuerte flexión de codo, al mismo tiempo que, mediante un semigiro en el eje vertical -movimiento de Tai Sabaki-, coloca su pie derecho en la zona interna -plano frontal- y un poco adelantado -plano sagital-, no más de diez centímetros, respecto a los pies de Uke. Posteriormente, culmina la acción de semigiro, tomando como eje su propio pie derecho y situando su pie izquierdo a la misma altura que el primero – planos frontal y sagital-, para, de este modo, mantener un estrecho contacto entre la espalda de Tori y el pecho de Uke; y flexiona ambas piernas hasta que los glúteos se sitúan a la altura de los muslos de Uke. Desde esta posición, y sin solución de continuidad, Tori carga el cuerpo de Uke sobre su espalda, a la vez que efectúa una rápida extensión de rodillas, flexionando el tronco y realizando una acción de tracción, con ambos brazos, hacia el frente y hacia abajo para, así, proyectar a Uke por encima y por delante de su hombro derecho – siguiendo una trayectoria lineal y perpendicular al plano frontal de Tori-.

Figura 1. Técnica Ippon Seoi Nague (Inogai y Habersetzer, 2002).

Figura 1. Técnica Ippon Seoi Nague

3. RESULTADOS.

Tras la descripción de la técnica objeto de estudio, y tras un exhaustivo análisis de las proyecciones ejecutadas por estos estudiantes universitarios, se detallan, a continuación, los 5 errores que con más frecuencia fueron observados -en más del 40% de sujetos-. Éstos, serán descritos atendiendo a un criterio de temporalidad cronológica que cabría esperar en una ejecución motriz de la técnica Ippon Seoi Nague. – Error 1: Tori, en el agarre inicial diestro, sitúa su mano izquierda en la manga derecha del judogi de Uke por debajo del codo.

Figura 2. Error 1 de Ippon Seoi Nague.

Figura 2. Error 1 de Ippon Seoi Nague

Error 2: Una vez concluido el movimiento de Tai Sabaki, el pie izquierdo de Tori se sitúa de manera inadecuada -por fuera (plano frontal), alejado más de 20 cm. (plano sagital), o delante (plano sagital)- respecto al pie izquierdo de Uke.

Figura 3. Error 2 de Ippon Seoi Nague.

Figura 3. Error 2 de Ippon Seoi Nague

Error 3: Tori proyecta a Uke por el costado de su cuerpo en lugar de ejecutar dicha acción por encima y por delante del hombro -siguiendo una trayectoria lineal y perpendicular al plano frontal de Tori-.

Figura 4. Error 3 de Ippon Seoi Nague.

Figura 4. Error 3 de Ippon Seoi Nague

Error 4: Tori realiza una flexión insuficiente de rodillas o se mantiene en extensión en la segunda fase de la proyección -Tsukuri-, de tal forma que su cadera no llega a situarse a la altura de los muslos de Uke.

Figura 5. Error 4 de Ippon Seoi Nague.

Figura 5. Error 4 de Ippon Seoi Nague

Error 5: Tori se desequilibra, en el plano sagital, después de proyectar a su compañero. Corrige su posición de alguna de las tres formas siguientes: apoyando su pie derecho hacia atrás, su pie izquierdo nuevamente hacia atrás o su pie derecho hacia delante. A continuación, tras la descripción de los errores observados en las distintas ejecuciones de Ippon Seoi Nague, presentamos en la siguiente tabla la frecuencia y el porcentaje de los errores constatados en el grupo de estudio (n=26).

Figura 6. Errores típicos en Ippon Seoi Nague.

Figura 6. Errores típicos en Ippon Seoi Nague

Tabla 1. Frecuencias y porcentajes de los errorestécnicos en Ippon Seoi Nague.

Tabla 1. Frecuencias

De este análisis se obtiene que tanto la reequilibración que se produce por parte de Tori tras la ejecución de esta proyección, como la falta de una acción óptima de flexión de piernas durante la fase de Tsukuri de la misma, son los errores que aparecen con mayor frecuencia en este grupo de estudio. Por otro lado, y a pesar de que en este artículo no se han descrito de manera específica, hemos de destacar que el grupo de sujetos estudiado ha cometido, a parte de los ya señalados, otra gran cantidad de errores diferentes -en torno a 15-, aunque su frecuencia no ha sido muy alta -entre 1 y 4 de los sujetos observados-. Esto podría indicar, en principio, que existen unos pocos errores que se pueden considerar como típicos y otros muchos que son menos relevantes o poco habituales. El análisis estadístico mediante la prueba U de Mann Whitney confirma la inexistencia de diferencias estadísticamente significativas (p<0,05) entre los hombres y las mujeres respecto a los errores cometidos en esta técnica en particular.

4. DISCUSIÓN

Tras una exhaustiva búsqueda en bases de datos y revistas de investigación específicas, hemos comprobado como son muy pocos aquellos estudios que realizan un análisis observacional de los errores en el aprendizaje de técnicas de judo (Blasco, 2005, Gutiérrez y Prieto, 2006, Suárez y Cortegaza, 2003). De esto modo, se realizó, además, una revisión bibliográfica, consultando prestigiosas obras de judo, tanto de ámbito nacional como internacional, con el fin de analizar las explicaciones que los autores realizan sobre las técnicas de este deporte. Algunos de los autores de estas obras se limitan a realizar únicamente una descripción detallada de la técnica. En cambio, otros ofrecen además un apartado específico de errores más frecuentes o de puntos fundamentales. Estas indicaciones, que posiblemente estarán basadas en la experiencia personal y profesional de los autores, coinciden, tal como indicaremos, en la mayoría de los casos, con los errores más frecuentes obtenidos en nuestra investigación tras el análisis observacional del grupo de estudio. Así, uno de los errores más habituales, referente a la falta de flexión de la articulación de la rodilla en la fase de Tsukuri de la proyección, aparece reflejado en la mayoría de las obras de gran repercusión en la doctrina del judo como un punto clave o fundamental -Error 4-. A modo de ejemplo, Kobayashi y Sharp (1995), indican lo siguiente: “Tori debe flexionar bien las piernas hasta que pueda cargar bien el abdomen de Uke sobre su cadera [espalda]” Dicha afirmación es compartida por otros muchos autores (Blasco, 2005, Carratalá y Carratalá, 2000; González y González, 2002; Marwood, 1995; Renault, 1975; Uzawa, 1981). Por todo ello, la importancia de este error es muy elevada, ya que se ha observado en casi un 85% de los sujetos analizados. La colocación del pie izquierdo durante la segunda fase de la proyección -Tsukuries otro de los errores que se produce en un alto porcentaje de alumnos observados -Error 2-. Kobayashi y Sharp (1995), así como Kawaishi (1964) o Blasco (2005) dan importancia a la colocación de éste en la zona interior con respecto a la situación del pie izquierdo de Uke. De todas formas, existe una gran discrepancia entre los diferentes autores en cuanto a la correcta ubicación de este pie, ya que algunos indican que perfectamente puede situarse delante (Franco de Sarabia, 1985) e incluso en el exterior (Barioli, 1994) de la posición que adopta el pie izquierdo de Uke Otro error cometido por un gran número de sujetos observados -el 4º más relevanteha sido la proyección del cuerpo de Uke por el costado, en lugar de proyectarle por encima y por delante del hombro -Error 3-. En la mayoría de las ocasiones este error es propiciado porque Tori no carga suficientemente el cuerpo de Uke sobre su espalda, siendo el causante de dicha circunstancia, en un alto número de casos, la incorrecta flexión de las rodillas – Error 4-. Así, algunos autores recogen, como un punto fundamental, la importancia de este aspecto técnico que, sin duda, resulta imprescindible para la optimización del presente modelo técnico ideal (Uzawa, 1970). También se ha observado frecuentemente la incorrecta situación del agarre que Tori realiza con su brazo izquierdo -Error 1- en la fase inicial de la técnica -Kuzushi-. Los autores recomiendan que se sitúe por encima del codo, o en su defecto, a la altura del mismo, pero en ningún caso mencionan la conveniencia de situar éste por debajo del codo (Fernández, 1985; García, Del Valle, Díaz y Velázquez, 2006; Taira, Herguedas y Román, 1992). La falta de un contacto firme de la espalda de Tori con el pecho de Uke tras el movimiento de Tai Sabaki que Tori debe efectuar para proyectar a su adversario, también aparece recogido como uno de los puntos importantes y como uno de los errores que más habitualmente se producen en esta acción técnica (Carratalá y Carratalá, 2000; Blasco, 2005; González y González, 2002; Pérez, 1974; Uzawa, 1981; Yerkow, 1974). De una u otra forma este error se ha producido en casi un 35% de los sujetos estudiados. Por último, creemos conveniente señalar que la mayoría de los judokas estudiados se desequilibran cuando realizan la ejecución de la proyección, utilizando alguno de sus pies, o incluso ambos, para reconducir su posición de equilibrio -Error 5-. Este error se ha presentado en casi el 75% de los sujetos -el 2º más numeroso-, aunque, es preciso destacar que no aparece reflejado en los manuales que hemos consultado como un punto relevante o un error típico. En cualquier caso y debido a la frecuencia del mismo, creemos conveniente tenerlo en cuenta en el entrenamiento de esta técnica.

5. CONCLUSIONES

Una vez realizado el análisis videográfico de la técnica Ippon Seoi Nague y tras un proceso de interpretación del mismo, las conclusiones de este estudio son las siguientes: – Los sujetos analizados cometen un gran número de errores diferentes, aunque sólo algunos de ellos se pueden considerar relevantes o significativos debido a la alta frecuencia con la que han sido observados. – La escasa flexión de la articulación de la rodilla en la fase de Tsukuri de esta proyección es el error más habitual del grupo estudiado. – La ejecución de Ippon Seoi Nague por el costado, en lugar de por encima y por delante del hombro, también ha sido observado en un gran número de judokas analizados. – El agarre incorrecto que Tori realiza con su mano izquierda sobre la manga derecha del judogui de Uke es causa también de un gran número de errores. – Se ha observado que una gran cantidad de los sujetos estudiados se desequilibran después de proyectar a Uke, realizando, por ello, una maniobra reequilibradora. – Existen una gran discrepancia entre los autores consultados en cuanto a la óptima situación de los pies de Tori en la fase de Tsukuri de la proyección. Algunos de ellos aconsejan su situación en el interior de los de Uke y otros indican que perfectamente se pueden colocar delante o incluso por fuera de los del adversario.

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