Coaching deportivo. Potencia tu talento y el de tus clientes
Coaching deportivo. Potencia tu talento y el de tus clientes
SOBRE LA DEFINICIÓN DE COACHING DEPORTIVO
El coaching deportivo consiste en una relación profesional entre un coach y un coachee (cliente), por la que se establecen los objetivos que se quieren conseguir, así como el camino para llegar a ellos. Según la International Coaching Federation (ICF) es un proceso continuo que ayuda a obtener resultados extraordinarios en la vida, profesión, empresa o negocios de las personas. Mediante el proceso de coaching, el cliente profundiza en su conocimiento, aumenta su rendimiento y mejora su calidad de vida.
Según la International Coaching Community (ICC), el coaching:
- Ayuda a las personas a cambiar de la forma en que lo desean y a encaminarse en la dirección a la que quieren dirigirse.
- Ayuda en todo nivel a las personas a convertirse en quienes desean ser.
- Construye conciencia, refuerza el poder de decisión y conduce al cambio.
Algunos de los autores más representativos del coaching internacional, han desarrollado definiciones en la línea que acabamos de comentar:
– JOHN WHITMORE: es un sistema que busca liberar el potencial que todos llevamos dentro a través de un proceso de acompañamiento, donde el facilitador o coach, apoya a la persona o coachee y actúa de puente entre su vida actual y su vida deseada, a través del autoconocimiento y la acción.
– JOSEPH O´CONNOR: es una revisión creativa a la luz de tus intenciones. Apoya de una forma respetuosa a las personas a conseguir lo mejor de su vida y de ellos mismos. Contribuye a que cada individuo llegue a ser lo mejor que puede ser.
– ROBERT DILTS: es un proceso en el que se ayuda a las personas o a los equipos a rendir el máximo de sus posibilidades. Implica hacer aflorar todo el potencial del individuo, ayudarle a superar sus barreras y limitaciones personales para alcanzar lo mejor de sí y facilitarle el modo de funcionar de la forma más eficaz como miembro de un equipo.
El proceso de coaching se realiza, como hemos apuntado, entre un coach y un coachee. El primero pregunta y escucha lo que el coachee le plantea, ayudándole a descubrir sus caminos, es decir, a que encuentre a través de la reflexión los pasos que debe dar para conseguir los objetivos que ha propuesto. El coachee, por su parte, responde y reflexiona sobre si el camino que está siguiendo es el apropiado y/o si debe ir modificándolo.
COACH —————————————————- COACHEE
(PROCESO DE COACHING)
COACH- Pregunta y Escucha, le ayuda a descubrir SUS caminos.
COACHEE- Responde y reflexiona sobre qué camino escoger.
CLAVES PARA APLICAR EL COACHING
– Capacidad de adaptación: en primer lugar, es necesario conocer al coachee (capacidad de observación y de análisis), para ser capaz de detectar en qué momento/s puede ser útil la utilización de esta metodología.
La capacidad de adaptación, también es fundamental, para saber encontrar el mejor momento para “hablar” con el coachee, qué tipo de cuestiones serán más poderosas para promover el cambio y cómo debemos dirigirnos a él.
– Romper barreras con el coachee: aunque no estemos hablando de una sesión habitual de coaching, cuando un director de recursos humanos utiliza la metodología del coaching con alguno de sus trabajadores, no debe perder de vista la importancia que tiene crear un buen clima. En este sentido, ser capaces de crear un ambiente de confianza y de tranquilidad, facilitará que el coachee pueda sentirse más libre para hablar con el coach y que perciba que éste le dedica una especial atención con el enfoque de mejorar su rendimiento y bienestar.
– Saber escuchar: en todo momento el coach debe ser capaz de escuchar al coachee, escuchar lo que le está transmitiendo con sus palabras y, al mismo tiempo, con sus movimientos o su comunicación no verbal.
La mejor escucha sería la escucha activa y empática:
Escucha activa
La escucha activa es la manifestación física de que se le está prestando atención. Aspectos como mirar a quién nos está hablando o asentir con la cabeza pueden facilitar que el coachee sepa que le estamos prestando atención. Y, en el mismo sentido, también podemos hacer pequeñas intervenciones que manifiesten afirmación: “si”, “de acuerdo”, “entiendo”, etc. O bien preguntas aclaratorias sobre aspectos concretos que no nos quedan claros, respecto a lo que nos está explicando el coachee.
Escucha empática
Aunque nuestro rol habitual sea el de director de recursos humanos, en los momentos en los que optemos para utilizar el coaching en nuestras interacciones con los trabajadores será muy importante que seamos capaces de ponernos en su lugar. En saber cómo se siente en el trabajo, en los momentos que está viviendo actualmente, en lo que vivió cuando cometió un error o cómo fue ese momento tan crucial del año para él. Este será el punto que nos permitirá ayudarle de una forma más profunda, entender (que no compartir o tolerar) como se siente o vive ciertas situaciones.
– Mostrar interés, curiosidad: debemos dar a entender a la otra persona que nos interesa lo que nos cuenta, que es importante para nosotros y que lo comprendemos.
Además, si en todo momento nos ponemos en la postura de interesarnos por lo que nos están contando será mucho más fácil que nos salgan las preguntas idóneas para la situación en la que nos encontramos.
– Ser neutro: uno de los aspectos más importantes para hacer una buena sesión de coaching y, al mismo tiempo, uno de los más difíciles, es ser objetivo e imparcial. El papel del coach, debe limitarse, simplemente a acompañar al coachee en la búsqueda de nuevos retos y de marcarse tareas para realizar. Así, debe mantener la distancia prudencial para no mezclar su opinión o su punto de vista, ni de forma directa ni de forma indirecta en sus preguntas o intervenciones.
FASES DEL PROCESO DE COACHING
El proceso de coaching varía levemente de unos autores a otros. En este texto proponemos las cinco fases que consideramos son fundamentales para poder estructurar correctamente las sesiones de coaching. Las fases, de todas formas, deben tomarse como una orientación, que deberán adaptarse a las características del coachee y a la situación que se esté trabajando en cada comento.
1ª Fase: Crear un clima apropiado.
En primer lugar debemos encontrar un lugar cómodo para poder desarrollar la sesión, pues puede tener una duración de entre 45min y 1h30m. Es fundamental que no haya interrupciones constantes o cualquier otra circunstancia que impida el buen desarrollo de la reunión.
Establecer el “rapport” con el coachee, es decir, buena conexión, feeling… En este sentido, es importante cuidar aspectos como la mirada, dónde y cómo estáis situados, proximidad al cliente, etc…
La/s primera/s pregunta/s deben servir para “romper el hielo”. Deben ser preguntas no trascendentales, planteadas de forma coloquial y cercana. Es bueno estar en una actitud sonriente, con un tono de voz adecuado y con un clima respetuoso y agradable para ambos.
2ª Fase: Contextualizar
En esta fase, las primeras cuestiones que se planteen deben servir para situarnos, tanto a nosotros como al coachee. Tendremos que identificar cuál es su estado actual y cuáles son sus necesidades. Al mismo tiempo, estas cuestiones iniciales deben servirnos para identificar cuál es la situación deseada por el coachee. Es decir, cuál es su objetivo.
Tabla 1. Coaching deportivo. Potencia tu talento y el de tus clientes
¿Cómo deben ser los objetivos?
Para establecer objetivos podemos emplear el acrónimo inglés SMART: Específicos, Medibles, Alcanzables, Realistas-retadores, Tiempo Limitado para su consecución.
3ª Fase: Análisis general (la realidad del cliente-deportista)
El coach debe conocer información general del coachee, referente al contexto familiar, contexto social, contexto laboral, barreras o limitaciones, puntos fuertes…, para poder ahondar de una forma más certera en cada uno de los objetivos que el coachee se marque.
4ª Fase: Análisis particular (Información específica sobre el tema a tratar)
En esta fase se llega al momento clave de la sesión de coaching. Las 3 fases anteriores son indispensables para recopilar la información necesaria que nos lleva a poder trabajar junto al coachee un determinado tema. La diferencia fundamental entre esta fase y las anteriores está en la habilidad del coach de lograr “abrir las puertas” apropiadas que le ayuden al coachee a escoger su camino hacia la consecución de sus objetivos.
Por ello, en esta fase se deben detectar las necesidades más marcadas de la persona. Valorar los caminos de éxito de éste o los que más le cuestan. Es el momento de “abrir y cerrar puertas” (el término “abrir puerta” hace referencia aquellos temas con los que el coachee se siente cómodo y no le importa indagar, mientas que “cerrar puertas” son los temas con los que el coachee no se siente tan cómodo y que, por deseabilidad social, puede responder, pero sin ser el momento adecuado para ello).
Si vemos que el coachee en ciertos momentos tiene la “puerta cerrada” debemos ser muy cuidadosos en ahondar en esta temática. Quizás esta puerta sólo esté cerrada temporalmente pero, al menos en ese instante, está cerrada. Forzar la entrada en ella puede hacernos retroceder muchos pasos en el camino recorrido, por lo que el riesgo es grande.
5ª Fase: Conclusiones finales (Recapitular y establecer tareas)
Toda sesión o intervención de coaching debe terminar con un COMPROMISO por parte del coachee. En este caso, el cliente siempre debe llevarse alguna tarea para realizar en su día a día.
CONTENIDOS DE UN PROGRAMA DE COACHING DEPORTIVO
Los Programas de Coaching Deportivo tienen la finalidad de dotar a los entrenadores, profesores de educación física, psicólogos, pedagogos u otros profesionales de herramientas que sirvan para la mejor gestión de los equipos, de los deportistas y de ellos mismos. En este sentido, el Certificado Internacional de Coaching Deportivo que promueve la Asocación de Profesores y Profesionales del Coaching y del Mentoring (APPROACHING) desarrolla conceptos claves en la formación de profesionales del deporte, como:
– INTELIGENCIA EMOCIONAL EN EL DEPORTE
– La tolerancia a la frustración: baja forma, lesiones, suplencia, burnout deportivo; etc.
– Permanecer en la zona óptima.
– Concienciar de la importancia de cultivar en el momento presente el futuro del deportista.
– COACHING DE COMUNICACIÓN
– La importancia de conocerse a uno mismo en cada momento o situación:
Gestión de la presión, Gestión del éxito y El “miedo escénico”.
– ¿Qué debo conocer de los demás? Potenciar el reconocimiento y recompensa. Feedback adecuado.
Facilitar el aprendizaje: natural, por auto- descubrimiento, por modelado…
– Automotivación: cómo ser capaz de mantener una motivación alta, independientemente del ambiente
– Gestión adecuada de las emociones, en cualquier circunstancia HHSS: empatía, asertividad, relación con
los medios, relación con los miembros de mi “equipo”…
– DESARROLLO DEL LIDERAZGO
– Sacar el máximo partido a la comunicación: Discurso CIEN.
-Limitaciones autoimpuestas en comunicación. Las etiquetas.
-Charlas para motivar y para hacer equipo (coaching grupal).
-Relación con los medios de comunicación.
-Factores que interfieren en la autoconfianza.
– OBJETIVOS Y METAS. AUTOCONFIANZA Y CREENCIAS. LOS PENSAMIENTOS.
-Ser un buen líder a través del coaching. Descubrir tus cualidades como líder.
¿Todos llevamos un líder dentro?.
– La mentalidad de un líder ganador. Tipos de líderes.
– El liderazgo en el campo y el liderazgo en el vestuario.
– Factores que inter!eren en la autocon!anza.
– GESTIÓN DE LA CARRERA DEPORTIVA
– Coaching individual: Deportistas, Entrenadores y Gerentes y/o directivos de un club.
– Coaching grupal: equipos y/o directivas. El ciclo vital de un grupo o equipo.
-Fomentar la cohesión grupal.
Bibliografía
– Materiales inéditos del Certificado de Coaching Deportivo de APPROACHING (Asociación de Profesores y Profesionales del Coaching y del Mentoring)