El tratamiento de la competicion escolar en las comunidades autonomas

Introducción

Se denomina deporte en edad escolar a todas aquellas actividades que, de forma organizada se celebran fuera del programa de la asignatura de Educación Física en los centros escolares, clubes, asociaciones, etc y en las que participan deportistas en edad escolar (CSD). Dentro de estas actividades, la competición escolar ocupa una buena parte del tiempo, por ello, se ha creído conveniente realizar un análisis de cómo la competición escolar es gestionada por las comunidades autónomas a través de sus respectivas normativas.

Para delimitar este tipo de programas de competición escolar, el artículo 3 de la Ley 2/2011, de 22 de marzo, de la Generalitat, del Deporte y la Actividad Física de la Comunitat Valenciana define los Juegos Deportivos de la Comunidad Valenciana (programa específico de competición escolar en la CV), como el «conjunto de competiciones y actividades de carácter deportivo, de convocatoria anual, dirigidas a la población en edad escolar, en atención a su diversidad y abierta a la participación de todo tipo de entidades y centros docentes».

Como parte de esta estructura de competición escolar, en la oficina técnica de los Juegos Deportivos Municipales del Ayuntamiento de Valencia, se trabaja atendiendo a los parámetros que fija la normativa autonómica, sin valorar cómo se están desarrollando estos programas en otros lugares. Por ello, el objetivo de este estudio es analizar las normativas referidas a la competición escolar en particular y al deporte escolar en general, y así obtener una visión general del tratamiento de la competición en edad escolar en las diferentes comunidades autónomas.

Dada la idiosincrasia del estado de las autonomías, la hipótesis que nos formulamos antes de hacer el análisis se ha cumplido en gran medida, dado que cada comunidad autónoma funciona de forma diferente en cuanto a la estructura de la competición escolar. Desde las instituciones encargadas de desarrollar el programa, la orientación de la competición o los diferentes programas que se ofertan, distinguen el desarrollo del deporte en edad escolar y más concretamente de la competición escolar en cada una de las autonomías. Esto ha supuesto una dificultad a la hora de comparar los programas, dado que cada región desarrolla su programa deportivo escolar de una forma determinada y con unas estructuras de competición y funcionamiento particulares en cada uno de los casos. En este sentido, cabe destacar que en algunos casos hemos tenido que centrar el estudio en estructuras provinciales o de isla o cabildo, ya que en determinadas comunidades, la organización a nivel autonómico se basa sólo en finales. Destacar asimismo, que no se ha llevado a cabo el estudio en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla dado su carácter local.

En definitiva, en esta comunicación se pretende destacar algunos de los aspectos más relevantes hallados en la investigación que denotan las diferentes políticas utilizadas para el desarrollo de las competiciones en edad escolar.  

Objetivos

Los objetivos propuestos a la hora de realizar el estudio han sido los siguientes:

• Estudiar la normativa de los programas fundamentados en la competición escolar en las diferentes comunidades autónomas
• Analizar los mencionados programas y extraer los aspectos más relevantes.
• Comparar los diferentes desarrollos de los programas de deporte en edad escolar organizados por las CCAA extrayendo similitudes y diferencias.
• Ampliar la visión de los diferentes sistemas deportivos de competición escolar existentes.
• Valorar la posible extrapolación de ideas de otras comunidades autónomas a la propia realidad buscando la mejora del sistema de competición escolar.

Método

Para efectuar el estudio, se revisaron todas las normativas que regulan los programas de competición en edad escolar en las distintas comunidades autónomas.

Una vez analizadas las normativas, se eligieron unos parámetros para poder efectuar una mejor comparación, de forma que se eligieron 14 aspectos a valorar como son:

• Programa: Se definen las distintas nomenclaturas utilizadas.
• Normativa: Se reflejan los diferentes actos jurídicos de la administración para convocar los programas.
• Entidad organizadora: Se pone de manifiesto el tipo de entidades que gestionan los programas.
• Objetivos: Se analizan los diferentes objetivos que presentan los programas.
• Participantes: Se valora a quien va dirigida la oferta y quien puede participar
• Categorías y géneros: Se muestran las diferencias en cuanto a edades y géneros de los participantes.
• Deportes: Se exponen los deportes ofertados en cada uno de los casos.
• Ámbito de actuación: Se indica el/los ámbito/s de competición.
• Momentos de la actividad: Se informa de los horarios fijados para el desarrollo de la competición.
• Nivel-Fases: En este apartado se presentan los niveles o fases que cada CCAA oferta.
• Otros Programas: Se estudian otros programas además del propiamente competitivo.
• Patrocinadores: Se subraya si existen empresas colaboradoras con los programas.
• Seguro médico: Se analiza la gestión del seguro médico para la competición.
• Particularidades: Se extraen los aspectos más diferenciadores de las normativas

Conclusiones

De los análisis efectuados de las diferentes normativas, podemos extraer las siguientes conclusiones atendiendo a los apartados citados anteriormente:

            a) Programa:

La nomenclatura utilizada para la competición escolar varía en función de las CCAA siendo la más generalizada la de “juegos deportivos” y “juegos deportivos escolares”. En otros casos, los programas se recogen dentro de un plan del deporte escolar más general, con lo que se utilizan denominaciones como “plan del deporte escolar” o “programa del deporte escolar”. Por último, algunas comunidades utilizan la palabra campeonato para referirse al programa de competición escolar.

            b) Normativa:

En cuanto a la normativa, encontramos que las CCAA regulan estos programas a través de órdenes y resoluciones, utilizando un algún caso concreto de programas más globales los decretos.

            c) Entidad organizadora:

Generalmente, el deporte escolar es organizado por la Consejería correspondiente de deportes que suele compartir competencias con la de cultura, turismo, salud o juventud. En algunos casos, encontramos también una organización llevaba a cabo con la colaboración de varias consejerías.
En un nivel más concreto de actuación, es la propia Dirección de Deportes o secretaría del deporte de las diferentes consejerías la que organiza el programa, aunque también existen otro tipo de organismos dependientes de estas consejerías como el Consell Valencià de l´Esport que se encargan de la competición.
Asimismo, ayuntamientos, diputaciones e incluso federaciones son incluidos dentro de la organización y coordinación de la competición.

            d) Objetivos:

Los objetivos que fijan las comunidades autónomas para este tipo de programas, son bastante similares, dado que se subraya la necesidad de ofrecer una educación integral de los niños y jóvenes, desarrollando su personalidad y hábitos deportivos, mejorando la salud, integrándolos socialmente (especialmente para los colectivos más vulnerables) y en definitiva ofreciéndoles una alternativa deportiva en la que se fomenten valores sociales y se mejore la calidad de vida y el bienestar social de los niños/as y jóvenes.

Además, en algunas normativas se recoge como objetivo la necesidad de coordinar efectivamente las diferentes administraciones, entidades y agentes tendiendo a una excelencia en los programas ofertados.
Otras normativas resaltan la utilización del juego como herramienta de trabajo, incidiendo en el aspecto más lúdico que debe tener la competición en la iniciación deportiva.  

En cuanto a los deportes autóctonos y deportes minoritarios, algunas CCAA asumen su papel como promotoras y facilitadores del desarrollo de éstos.
Por último, otro aspecto relevante que se recoge, es el objetivo de formar a los técnicos que rigen este deporte escolar para que puedan desarrollar su labor de una forma más efectiva.

e) Participantes:

En líneas generales, se permite, además de la participación de los centros escolares, de clubes y entidades legalmente constituidas según las legislaciones al respecto en cada uno de los territorios. Aún así, existe algún programa específico (dirigido por ejemplo a centros educativos o más concretamente a institutos), en el que sólo se permite la participación de escolares a través de los centros dada la idiosincrasia de los propios programas. Igualmente, existe alguna comunidad que distingue las entidades participantes según las categorías, permitiendo exclusivamente la participación de centros escolares hasta la categoría infantil dejando abierta la participación a otro tipo de entidades según la normativa específica de cada uno de los deportes.

f) Categorías y géneros:

La normativas presentan directrices bastantes similares en cuanto a las edades se refiere exceptuando algunos deportes, en los que las edades de los participantes y categorías no se ajustan a las generales, quedando este hecho claramente especificado en el atletismo, la natación o la gimnasia entre otros.
En cuanto a los géneros de participación, la regla general es la separación de las competiciones masculinas y femeninas, aunque suele permitirse la existencia de una competición mixta según reglamentación específica de cada uno de los deportes.

Como aspectos más diferenciados, encontramos por ejemplo la promoción que se hace del deporte femenino en una comunidad en concreto, donde se permite la participación femenina en los juegos deportivos de mujeres hasta los 30 años en la categoría juvenil o en otra categoría diferenciada según las federaciones. Por otro lado, el intervalo de edad ofertado varía entre unas comunidades y otras, llegando incluso en algunos casos a iniciarse en la categoría querubín (4 años) y en otros teniendo una competición juvenil con la posibilidad de abarcar hasta cuatro edades diferentes.

Por último, aunque en la mayoría de los casos se respeta la misma serie de categorías y fechas de nacimiento, destacar como algunas comunidades vinculan específicamente los niveles educativos con las categorías y las edades de competición, de forma que el desarrollo educativo del participantes van enteramente vinculado a su desarrollo deportivo. 

g) Deportes:

En cuanto a los deportes que se programan, cabe destacar que existe una gran variedad dependiendo de la comunidad autónoma a la que nos refiramos. En algunos casos, se estipula la posibilidad de desarrollar cualquier deporte reconocido oficialmente siempre que exista un número mínimo de equipos o participantes. En otros casos, se realiza una oferta más cerrada en cuanto a los deportes que se desarrollan, clasificándolos generalmente como deportes individuales o colectivos y especificando las categorías en las que éstos se desarrollan. 

Otro aspecto a destacar, es la oferta que se realiza de los deportes autóctonos;  según se observa en las distintas normativas, este tipo de modalidades suele tener un tratamiento especial de forma que en algunos casos se llegan a realizar las adaptaciones pertinentes en los reglamentos para que sean desarrollados de una forma progresiva desde las primeras categorías. En este sentido, además de los deportes autóctonos, existen autonomías en las que se convocan explícitamente, modalidades multideportivas (con un objetivo lúdico y participativo) para las edades más tempranas de forma que se evita la especialización precoz de los participantes. 

Por último, subrayar que los deportes adaptados también tienen cabida  en estos programas.

h) Ámbito de actuación:

Cada comunidad distribuye y organiza los campeonatos de forma distinta; las peculiaridades de cada territorio provocan que los ámbitos en los que se desarrolle la competición varíen. En todo caso, los modelos suelen seguir el siguiente esquema: competición local ð competición comarcal / zonal / intermunicipal ð competición provincial ð competición autonómica ð competición nacional.

i) Momentos de la actividad:

Pocas son las comunidades que en la normativa general especifican los momentos en los que puede desarrollarse la competición, por lo que se entiende que las normativas específicas de cada uno de los deportes son las que marcan estos días de competición. Sin embargo, en aquellas comunidades en las que sí que se recoge este aspecto, se fija como día más repetido para el desarrollo de la competición los sábados, principalmente por la mañana, permitiéndose también en algunos casos la competición en viernes por la tarde y/o domingos por la mañana. Sin embargo, cabe destacar que existe un programa especial dirigido a los institutos, en los que se fija el horario de competición entre semana en horario no lectivo lo martes y jueves por la tarde de 16:00-18:00.

j) Nivel-Fases:

Tal y como se ha expuesto anteriormente, la competición suele organizarse según el ámbito geográfico en el que se desarrolla, pero además, las normativas incluyen niveles de participación. En este caso podemos encontramos dos o tres niveles de participación en los que se diferencia la competición de promoción de la de rendimiento.
Asimismo, a medida que los equipos se van clasificando, van optando a la disputa de las fases finales autonómicas de las que salen de las categorías infantil y cadete principalmente, los participantes para los distintos campeonatos de España que organiza el Consejo Superior de Deportes.

k) Otros Programas:

Las comunidades, además de la propia competición, regulan otra serie de programas deportivos para incentivar la práctica. La coordinación entre los centros educativos y las propias instituciones es un aspecto que se regula en estos programas complementarios, de forma que se pueda incrementar la práctica deportiva de los escolares, incidiendo sobre todo en la población femenina y en aquella con problemas de integración. Asimismo, la importancia de la profesionalización de los agentes que controlan y dirigen estos programas, es también un aspecto que ve reflejado y en el que se anima a los centros educativos a ser dinamizadores del deporte escolar. 

Como pieza clave en el desarrollo del deporte en edad escolar, destacamos los programas específicos de educación en valores donde se trabaja, tal y como se apunta en una normativa específica, el respeto, la igualdad, el esfuerzo, la no violencia, la cooperación, la diversión, el juego limpio, la tolerancia o la responsabilidad personal.
Los deportes minoritarios también son objeto de especial atención ya sea en el propio horario lectivo o en el no lectivo, de forma que reciben un tratamiento especial para su práctica y difusión.

La salud es otro aspecto que se subraya como objetivo principal en estos programas complementarios; la utilización del deporte para luchar contra la obesidad y el sedentarismo y crear hábitos saludables y deportivos se pone de manifiesto en las disposiciones de las comunidades.
De forma específica y adicional, también se da cabida a otros deportes como la vela o los deportes de invierno, que suelen ser desarrollados a través de acciones específicas.

En definitiva, el objetivo que se busca es ofrecer un deporte para todos (en este caso para los más pequeños), con las acciones anteriormente comentadas y otras específicas basadas por ejemplo en el juego como instrumento de iniciación deportiva, en los deportes olímpicos como medio de promoción deportiva general y concreta de un evento específico, o el acercamiento de las asociaciones deportivas a los centros educativos como medio de promoción de sus actividades como estructura fundamental en el desarrollo deportivo social.

l) Patrocinadores:

En los casos en los que la competición está patrocinada, suelen ser las cajas de ahorros de la región correspondiente, las que apoyan estos programas. Por lo demás, existe algún caso en el que hay otras empresas implicadas, tanto del ámbito geográfico donde se desarrolla la competición como de ámbito global.
 
m) Seguro médico:

La mayoría de las comunidades funciona con la mutualidad general deportiva, aunque en algunos casos también se utilizan entidades privadas de gestión sanitaria o el propio servicio de salud pública correspondiente (para atención general o sólo en 1ª instancia). Asimismo, se incluyen seguros de responsabilidad civil y de accidentes para todo lo que acontezca relacionado con la competición.
En la mayoría de las comunidades el servicio es gratuito, aunque existe algún caso en el que supone un coste.

n) Particularidades:

Cada una de las comunidades, presenta ciertos aspectos particulares en cuanto al desarrollo de los Juegos y que no se encuentran en los apartados analizados anteriormente.
En cuanto a las ayudas en la competición, existen casos en los que se ofrece ayuda a los participantes en el transporte, la alimentación o el material deportivo.
En cuanto al aspecto organizativo, existe alguna comunidad que no sólo organiza y se encarga de la competición, sino que además facilita en coordinación con las federaciones técnicos deportivos para colaborar con los centros en su desarrollo deportivo.

El juego limpio también está muy presente en algunas normativas, y aunque en algunos casos sólo se limita a promulgar la necesidad de desarrollar una competición basada en el Juego Limpio y en valores formativos, en otros casos se complementa con reconocimientos a nivel particular y colectivo para acciones especialmente relevantes en este sentido.
Las actividades formativas son otro aspecto que se pone de manifiesto, instando a la celebración de cursos y charlas relacionadas con la competición dirigidas a los educadores. Algunas comunidades van más allá, regulando específicamente los profesionales que se encargan de dirigir a los equipos o incluso de aquellos que coordinan los centros y entidades participantes.
Las diferentes comisiones y/o comités, son igualmente regulados por las normativas de las CCAA, indicando las competencias y obligaciones de cada uno de estos órganos de gestión encargados del desarrollo de la competición.
En cuanto a las instalaciones, en algunos casos se recoge la necesidad de cumplir con todas las especificidades en cuanto a la seguridad de las mismas, incidiendo en la necesidad de garantizar la seguridad de todos los participantes en los programas.
La divulgación de los programas también se regula en algunos casos, llegando incluso a tener la posibilidad de acceder a fotos e incluso vídeos de la competición.

Por último, destacar que existen otras acciones o regulaciones como la creación de un carnet de deportista o los derechos de formación y retención de los participantes que también son aludidos en las normativas.  
Como se ha podido observar en el análisis de los programas, las autonomías presentan diversas tipologías de programas, y cada una de ellas centra su atención en un aspecto de la competición. En líneas generales, se echa en falta una coordinación general de los distintos programas y una mayor sinergia en la actuación de las CCAA, dado que cada uno de ellos presenta una idiosincrasia propia. Por ello, con este trabajo se pretendía poner de manifiesto los aspectos más importantes y de qué forma son tratados por las CCAA.

En cuanto al presente, conviene destacar que según los datos de un estudio del CSD, “la práctica de la actividad física y deportiva en niños y adolescentes presenta valores por debajo de las recomendaciones de los expertos y de las instituciones internacionales de referencia en el ámbito de la salud”, estas recomendaciones fijan que “el tiempo necesario de actividad física y deportiva en niños y adolescentes para lograr beneficios para la salud y prevenir y combatir los efectos negativos del sedentarismo se estima en una hora al día”. Por todo ello, sería conveniente que estos y otros programas deportivos para la población en edad escolar, tuvieran como objetivo mínimo la práctica deportiva de una hora diaria.

Para el futuro, sería necesario valorar de qué forma estos programas ayudan e influyen no sólo en la práctica presente de los niños y niñas, sino también de qué forma les afectan en su práctica deportiva futura.