Nivel actividad física y salud, autopercibida, en alumnado de E.S.O. de la Comunidad Autónoma Andaluza.
RESUMEN
La actividad física y el ejercicio físico son términos que en ocasiones se utilizan indistintamente; sin embargo en términos científicos, pueden tener significados diferentes; Actividad Física: se refiere a las actividades cotidianas, como andar, montar en bicicleta, etc. Ejercicio Físico: es un esfuerzo planificado e intencionado, al menos en parte, para mejorar la forma física y la salud. Hay estudios que analizan los diversos métodos que se pueden utilizar, para analizar la práctica de actividad física, de entre todos ellos el cuestionario es reconocido como el más práctico, siendo conscientes de sus limitaciones, y goza con el reconocimiento de la comunidad científica (Ainsworth et al., 1994; Mathews, 2002). La Organización Mundial de la Salud en 1960 definió la salud como “el estado de bienestar completo a nivel psíquico, físico y social, y no la simple ausencia de enfermedad” (Perea, 1992). El presente estudio es cuantitativo, correlacional y de corte transversal. Los sujetos objeto de estudio son estudiantes adolescentes de entre 13 y 15 años escolarizados en la CCAA Andaluza. Los sujetos objeto de investigación han sido 495 alumnos de Educación Secundaria Obligatoria de ambos sexos y de entre trece y quince años de la Comunidad Autónoma Andaluza, de los cueles 258 son hombres y 237 mujeres. Los resultados más significativos afirman que los valores medios de práctica de actividad fisica en los varones son más elevados que en las mujeres. Respecto a las preguntas que estudian la salud, las mujeres perciben su salud como más pobre o deteriorada en comparacion con los hombres. Las conclusiones fundamentales a las que se llegaron fueron: Los varones son más activos que las mujeres en todos los grupos de edad, la práctica de actividad física se reduce conforme se incrementa la edad de los sujetos y las mujeres perciben su salud más pobre que los hombres, al igual que lo sujetos de mayor edad en comparación con los jóvenes.
INTRODUCCIÓN.
La actividad física y el ejercicio físico son términos que en ocasiones se utilizan indistintamente; sin embargo en términos científicos, pueden tener significados diferentes. El Consejo Europeo de Información sobre Alimentación (EUFIC), hace la siguiente diferenciación: Actividad Física: se refiere a las actividades cotidianas, en las que hay que mover el cuerpo, como andar, montar en bicicleta, subir escaleras, hacer las tareas del hogar, ir a la compra, y la mayoría de ellas forman parte inherente de nuestra rutina. Ejercicio Físico: es un esfuerzo planificado e intencionado, al menos en parte, para mejorar la forma física y la salud. Puede incluir actividades como andar a paso ligero, la bicicleta, el aeróbic y quizás algunas aficiones activas como la jardinería y los deportes competitivos. Para analizar la práctica de actividad física hay estudios que analizan los diversos métodos que se pueden utilizar, de entre todos ellos el cuestionario es reconocido como el más práctico, siendo conscientes de sus limitaciones, y goza con el reconocimiento de la comunidad científica (Ainsworth et al., 1994; Mathews, 2002). Hellín (2003) en su estudio sobre los hábitos deportivos en la Región de Murcia determina que si relacionamos la práctica de actividad física con la edad, los mayores niveles de práctica se contabilizan entre los sujetos de 15 a 25 años. Por su parte, García Ferrando (1990 y 1997) obtiene unos datos muy parecidos, afirmando que la tasa de participación en actividades físico-deportivas es superior entre las edades de 15 a 20 años, en comparación con individuos de más de 50 años de edad. El concepto de salud a menudo esta relacionado con el de normalidad, pero esto extendido a los humanos es muy difícil de aplicar, dado que somos unos seres cambiantes. Tal como indica Marcos Becerro (1989) la salud se comprende mejor por los contenidos de su concepto que por una definición académica (Marcos Becerro, 1989; Marcos Becerro, 1994). En la salud inciden diferentes variables como bilogía humana, medio ambiente, estilo de vida y sistema de atención sanitario (D´Amours, 1988; Petlenko y Davidenko, 1998). La Organización Mundial de la Salud en 1960 definió la salud como “el estado de bienestar completo a nivel psíquico, físico y social, y no la simple ausencia de enfermedad”, se hace necesaria la prevención de la enfermedad y la promoción de la salud. La salud es un concepto multidimensional, donde el contexto social juega un papel preponderante. Así pues, Perea destaca la salud como el “conjunto de condiciones y calidad de vida que permita a la persona desarrollar y ejercer todas sus facultades en armonía y relación con su propio entorno” (Perea, 1992). Como objetivos se han propuesto:
- Averiguar los niveles de práctica de actividad física. Pretendemos conocer la cantidad de días a la semana de práctica, así como el nº de minutos diario.
- Conocer la salud autopercibida de los adolescentes. Las respuestas obtenidas se hallarán en base a diferentes indicadores relacionados con el padecimiento de algún tipo de dolencia o enfermedad y la escala de vida, entre otros.
MÉTODO
El presente estudio es cuantitativo, correlacional y de corte transversal. Se llevó a cabo una sola toma de datos y posteriormente se procedió al análisis de los mismos mediante SPSS (versión 15.0). Los sujetos objeto de estudio son estudiantes adolescentes de entre 13 y 15 años escolarizados en la CCAA Andaluza.
Muestra
Los sujetos objeto de investigación han sido 495 alumnos de Educación Secundaria Obligatoria de ambos sexos y de entre trece y quince años de la Comunidad Autónoma Andaluza, de los cuales 258 son hombres y 237 mujeres (Gráfico 1).
Gráfica 1. Reparto muestra el función del sexo de los sujetos.
Se realizó un muestreo aleatorio por conglomerados y estratificado con afijación simple. Para obtener la cantidad muestral se ha recurrido a análisis estadístico atendiendo a la Fórmula de Bugeda.
Hipótesis
Los chicos son más activos que las mujeres. Las mujeres perciben su salud más deteriorada que los varones.
Instrumento
El instrumento fue un paquete de cuestionarios que nos permite analizar la imagen corporal, composición corporal de los sujetos y la práctica de actividad física. El citado instrumento está conformado por:
- Cuestionario sobre la actividad física (Robert, Tynjälä y Komkov, 2004). Formado por 2 ítems con una escala de respuesta tipo likert de 8 opciones. Las preguntas son: 1ª.- En los últimos 7 días, ¿en cuántos hiciste, al menos, 60 minutos de actividad física? y 2ª.- En una semana cualquiera, ¿cuántos días hiciste, al menos, 60 minutos de actividad física?
- Cuestionario sobre la salud autopercibida (Torsheim, Välimaa y Danielson, 2004). Lo compone 3 ítems con una escala de respuesta mixta de entre 4 y 10 opciones de respuestas múltiples. Las preguntas son: 1ª.- Dirías que tu salud es, 2ª.- En los últimos seis meses, ¿con qué frecuencia has tenido algo de lo siguiente: Dolor de cabeza, dolor de estómago, dolor de espalda, estado triste, irritabilidad, mal humor, sentido nervioso, dificultades en conciliar el sueño y sentido vértigo? y 3ª.- Si en una escala, 10 es la mejor vida posible para ti y 0 es la peor vida posible para ti, ¿dónde sientes que estas situado/a en la escala?
El cuestionario es anónimo, consta de 4 páginas y se tarda en cumplimentarlo 20 minutos, apareciendo al principio unas instrucciones que facilitan la compresión del mismo.
RESULTADOS
Tanto en al realizar la media como la mediana se observó que no existian diferencias.
Tabla 1. Valores medios, mediana y desviación típica de la muestra en las preguntas 16 y 17.
Los valores medios de práctica de actividad fisica en los varonoes son más elevados que en las mujeres, tanto en la pregunta 16 como en la 17, encontrándose diferencias estadisticamente significativas (p<0.001) (tabla 2). Respecto a las preguntas que estudian la salud de los sujetos, en la numero 19, se han obtenido significatividad (p<0.001), siendo las mujeres las que perciben su salud como más pobre o deteriorada en comparacion con los hombres (tabla 2).
Tabla 2. Valores medios, mediana, desviación típica y nivel de significatividad de la muestra en las preguntas 16, 17, 18, 19 y 20. Division en funcion del sexo.
La práctica de actividad física se reduce a medida que los sujetos van cumpliendo años, localizándose las mayores cotas de actividad en los 13 años. La salud por su parte experimenta un descenso paralelo al incremento de la edad, siendo los individuos de mayor edad los que la perciben como más pobre o deteriorada, sufren más molestias y doleres y en general se situan en la escala de vida en unos umbrales inferiores (tabla 3).
Tabla 3. Valores medios, mediana, desviación típica y nivel de significatividad de la muestra en las preguntas 16, 17, 18, 19 y 20. División en función de la edad.
DISCUSIÓN
En un estudio a nivel europeo se concluyó que el número de días de práctica de AF durante al menos 60 minutos es superior en los varones que en las mujeres en todas las franjas de edad, también es reseñable que se produce un descenso paulatino a medida que la edad de los sujetos se incrementa. Todos aquellos sujetos que practican al menos una hora de AF moderada o vigorosa durante cinco días o más a la semana son incluidos dentro de los que cumplen las recomendaciones de la MVPA (moderate-to-vigorous physical activity). Dentro de este grupo los porcentajes varían entre sexos, siendo los hombres más activos que las mujeres, mientras que los jóvenes practican más AF que sus compañeros de edades superiores (Tynjälä y Komkov, 2004). Estos datos son similares a los obtenidos en el presente estudio donde son también los hombres los que practican más actividad física. Al analizar la práctica físico-deportiva es interesante analizar como cambia esta tendencia con el paso de los años. Diferentes investigaciones sobre esta cuestión concluyen que del tránsito de la edad escolar a la adulta esta se ve reducida (García Ferrando, 1993, 1997). Esta misma tendencia fue observada en otros estudios, donde se pudo apreciar que la práctica de actividad física se reduce con forme avanza la edad, haciéndose más patente este retroceso en la adolescencia (Bungum y cols., 2000; Busser y cols., 1996; Gili-Planas y Ferrer Pérez, 1994; Ryckman y Hamel, 1995). El género también es un aspecto diferenciador a la hora de la práctica de actividad física. Los estudios de García Ferrando y Maestre Sancho (2000) corroboran que los varones dedican más tiempo al ocio activo que las mujeres. Estas afirmaciones concuerdan con las de Hellín (2003) que analizó los hábitos físico-deportivos de la Región de Murcia y con Casimiro y Añó (2003), en un estudio realizado sobre la población almeriense. Fuera del ámbito nacional, Sallis y cols. (1992 y 1996), citado por Hellín (2003), coinciden en afirmar que efectivamente hay diferencias de práctica deportiva, entre los hombres y las mujeres, siendo los varones los que presentan mayores cotas de actividad física. En base al estudio de Torsheim, Välimaa y Danielson (2004) los españoles son de los que mejor salud disfrutan, incrementándose los porcentajes de sujetos que dicen tener una salud pobre conforme avanza la edad. Los que gozaban de una mejor salud son los hombres, independientemente de la edad. Circunstancias, ambas, que coinciden plenamente con la nuestra investigacion.
CONCLUSIONES
Los varones son más activos que las mujeres en todos los grupos de edad. La práctica de actividad física se reduce conforme se incrementa la edad de los sujetos. Las mujeres perciben su salud más pobre que los hombres, al igual que lo sujetos de mayor edad en comparación con los jóvenes.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
- Ainsworth, B.E., Jacobs, D.R., Leon, A.S., Montoye, H.J., Sallis, J.F. y Paffenbarger, R.S. (1994) Compendium of physical activities: Classifications of energy cost of human physical activities. Med. Sci Sports Exerc, 25, 71-80.
- Bungum, T.; Dowda, M.; Weston, A.; Trost, S. G. y Pate, R. (2000). Correlates of physical activity in male and female youth. Pediatrics Exercise Science, 12 (1), 71-79.
- Busser, J. A.; Hyams, A. L. y Carruthers, C. P. (1996). Differences in adolescent’s activity participation by gender, grade and ethnicity. Journal of park and recreation administration, 14 (4), 1-20. Casimiro, A. J. (1999). Comparación, evolución y relación de hábitos saludables y nivel de condición física-salud en escolares, entre final de educación primaria (12 años) y final de educación secundaria obligatoria (16 años). Tesis Doctoral. Granada: Universidad de
- Granada. Universitarios. Revista de Psicología del deporte, 9-10, 51-63.
- Casimiro, A. J. y Añó, V. (2003) Imagen social de los juegos mediterráneos y hábitos deportivos de la sociedad Almeriense. Ed: Universidad de Almería.
- García Ferrando, M. (1993). Tiempo libre y Actividades Deportivas de la juventud en España. Madrid: Ministerio de Asuntos Sociales.
- García Ferrando, M. (1997). Los hábitos deportivos de los estudiantes españoles. Documento sin publicar. Madrid: M. E. C.
- Gili-Planas, M. y Ferrer-Pérez, V. (1994). Práctica deportiva y estereotipos de género: un estudio en la Comunidad Autónoma de las Islas Baleares (CAIB). Revista de Psicología del Deporte, 5, 81-88.
- Hellín, P. (2003). Hábitos físico-deportivos en la Región de Murcia: implicaciones para la elaboración del currículo en el ciclo formativo de Actividades Físico-deportivas. Tesis Doctoral. Murcia: Universidad de Murcia.
- Marcos Becerro, J. F. (1989). Salud y deporte para todos. Madrid: Eudema.
- Marcos Becerro, J. F. (1994): Ejercicio físico, forma física y salud. Madrid: Eurobook.
- Perea, R. (1992). Educación para la salud. En: Las materias transversales como criterio de calidad educativa. III Jornadas sobre la LOGSE. Granada: Proyecto Sur de Ediciones.
- Petlenko, V. P. y Davidenko, D. N. (1998). Esbozos de valeología: Salud como valor humano. San Petersburgo: Ciencias de la Educación del Báltico Robert, C., Tynjälä y Komkov, A. (2004). Physical activity. Word Health Organization, 4, 90-97.
- Ryckman, R. M. y Hamel, J. (1995). Male and female adolescents’ motives related to involvement in organized team sports. International Journal of sport psychology, 26 (3), 383-397.
- Torsheim, T., Välimaa, R. y Danielson, M. (2004). Health and well-being. Word Health Organization, 4, 55-62.