Representación del somatotipo de un equipo de discapacitados psíquicos
Resumen somatotipo de un equipo de discapacitados psíquicos
Los estudios de la morfología en equipos de fútbol sala con discapacidad intelectual nos permiten conocer, comparándolos con otras poblaciones o modalidades, las modificaciones que son precisas de acometer para adecuar la actividad física a las necesidades concretas de los jugadores en la modalidad estudiada, así como la modificación para realizar una práctica deportiva saludable.
1. Introducción
En la sociedad del espectáculo y de los resultado en las que nos encontramos inmersos en nuestros días, existen otros deportes con otro tipo de practicantes que poco tienen que ver con grandes cantidades de dinero y numerosos medios de comunicación. Bien es sabido que hay ciertos deportes, que carecen de mucha repercusión mediática, más aun si los deportistas que los practican también son minoría, como ocurre en nuestro estudio. En un trabajo de Mª Magdalena Nájera (Nájera y cols., 2000) se indica que “La discapacidad en sí genera alteraciones en la nutrición y pobre nivel de actividad física. Aunque no se han señalado los factores de riesgo cardiovascular como posibles agentes que participen en la morbimortalidad de est5as personas, en algunas investigaciones ha sido reportado que personas con discapacidad mental tienen muy bajo nivel de actividad física, mala composición corporal y pobre capacidad funcional”. El estudio de la actividad física en personas con discapacidad es un problema complejo que no afecta a un solo factor o ámbito, sino que se trata de abordar la cuestión de forma más general. Así mismo no solo se valora conocer la cantidad de grasa, sino que también es importante su distribución (Villagra y Luna, 2000). Lo que en una posible continuación de este trabajo se podría estudiar con una muestra más amplia. La elección del método antropométrico para nuestro estudio es debido a que es el que menos interviene con el sujeto estudiado, aun sabiendo que tiene grandes inconvenientes al tener sus ecuaciones una mala estimación en otras poblaciones respecto a la población estudiada, y se conoce como especificidad poblacional de las ecuaciones de estimación, demostrada por varios autores (Lohman, 1981, 1986; Mukherjee y Roche, 1984; Wilmore, 1983, todo ellos citados por J.L Pacheco del Cerro (Pacheco del Cerro, 1996)
2. Objetivos del proyecto
– Conocer el peso graso y el IMC de un equipo de fútbol sala que participa en la liga de la FEAPS. – Determinar el somatotipo y su representación de cada uno de los componentes así como hallar el peso en cuatro componentes (óseo, residual, graso y muscular)
3. Material y método
a. Población: El estudio ha sido llevado a cabo con el equipo del nivel de Competición de un equipo que participa en la liga de la FEAPS, una competición regional de clubes, 11 jugadores. Los datos de la discapacidad han sido obtenidos de los certificados médicos, los cuales siendo realmente escuetos, no determinando en muchos casos el origen de la discapacidad.
Se trata de un equipo en el que todos los integrantes del mismo son mayores de dieciocho años y compiten en la categoría de competición, que en la que se encuentran los sujetos con menos discapacidad y poseen más habilidad. Todos los componentes del equipo llevan una práctica deportiva continuada de más de 5 años de forma regular (al menos 2 veces por semana) excepto uno de ellos que tan solo lleva 3 años (sujeto 4), realizando dos entrenamientos de una hora y media cada uno por semana, más la competición el fin de semana. En cuanto al contenido de los entrenamientos siguen más o menos un patrón general que es: calentamiento general, calentamiento específico, ejercicios de velocidad, trabajo de técnica y táctica, partido. b. Técnicas e instrumentación de la investigación Materiales: Para llevar a cabo las mediciones antropométricas se utilizó: – Báscula Soehnle Body Balance Pacific. Precisión: 0,1 kg. Para medir el peso – Lipometro Harpender. Precisión: 2mm. Para la medición de los pliegues – Cinta métrica de 3 metros 3M Para determinar la talla. – Cinta métrica (de sastre) de 1,5 m. para medir los perímetros – Calibre con precisión 2 mm. Para medir los diámetros. Métodos: Las medidas antropométricas que se realizaron fueron: – Peso, talla de pie, 4 pliegues cutáneos (subescapular, tricipital, medial de la pierna, suprailicaco) 2 perímetros (brazo flexionado y de la pierna) 3 diámetros (biestiloideo, bicondíleo del húmero y bicondíleo del fémur) Para la toma de medidas se ha seguido el manual de instrucción del “Somatotipo antropométrico Heath-Carter en el que describe la correcta realización de las mediciones. Del mismo modo se mantuvieron las condiciones generales indicadas por el Grupo Español de Cineantropometría (GREC) basado en la Sociedad Internacional para Avances en Cineantropometría (ISAK) (Candá y Espaza , 1996) A través de estas medidas se dedujeron:En cuanto al contenido de los entrenamientos siguen más o menos un patrón general que es: calentamiento general, calentamiento específico, ejercicios de velocidad, trabajo de técnica y táctica, partido. b. Técnicas e instrumentación de la investigación Materiales: Para llevar a cabo las mediciones antropométricas se utilizó: – Báscula Soehnle Body Balance Pacific. Precisión: 0,1 kg. Para medir el peso – Lipometro Harpender. Precisión: 2mm. Para la medición de los pliegues – Cinta métrica de 3 metros 3M Para determinar la talla. – Cinta métrica (de sastre) de 1,5 m. para medir los perímetros – Calibre con precisión 2 mm. Para medir los diámetros. Métodos: Las medidas antropométricas que se realizaron fueron: – Peso, talla de pie, 4 pliegues cutáneos (subescapular, tricipital, medial de la pierna, suprailicaco) 2 perímetros (brazo flexionado y de la pierna) 3 diámetros (biestiloideo, bicondíleo del húmero y bicondíleo del fémur) Para la toma de medidas se ha seguido el manual de instrucción del “Somatotipo antropométrico Heath-Carter en el que describe la correcta realización de las mediciones. Del mismo modo se mantuvieron las condiciones generales indicadas por el Grupo Español de Cineantropometría (GREC) basado en la Sociedad Internacional para Avances en Cineantropometría (ISAK) (Candá y Espaza , 1996) A través de estas medidas se dedujeron:
c. Tratamiento de los datos Para el cálculo del somatotipo así como de la somatocarta, y de sus componentes se utilizó el software: Somatotype-Calculation and Análisis V1.1 Completando los cálculos correspondientes mediante el programa Microsoft Excel y las fórmulas presentadas.
4. Resultados
Los resultados obtenidos con las diferentes variables son los siguientes:
Tabla 1. Peso, Talla, IMC y Peso en 4 componentes diferentes.
Gráfico 1. Somatocarta del grupo de estudio.
Gráfico 2. Distribución de los somatotipos en la somatocarta.
Tabla 2. Resumen del estudio: Media, mediana, desviación y rango.
5. Discusión
Realizando primeramente una descripción de lo que se hemos encontrado, decir que en lo que respecta al somatotipo, la variabilidad de los perfiles encontrados es muy variado: 5 sujetos presentan el perfil mesomorfo-endomorfo; hay 1 sujeto de cada uno de los siguientes: endomorfo-ectomorfo, endomorfo balanceado, ectomorfo-endomorfo y endomorfo balanceado y también se ha conseguido un somatotipo determinado “desconocido” al dar unos resultados muy poco usuales. Predomina el perfil de sobrepeso sobre los otros dos, datos que también descubrimos en el IMC. De los que se ha determinado el perfil meso-endomorfo (Sujetos 1, 2, 3, 4 y 6) todos ellos presentan un IMC por encima del límite de la salud (25) e incluso dos de ellos, sujetos 2 y 4, se encuentran en la fraja de la obesidad leve (30-35). De estos sujetos dos de ellos, nº 1 y 2, son los únicos con síndrome de Down en el equipo. Síndrome que entre otras características presenta una obesidad de los que lo poseen. Tan solo hay otro deportista que presenta un IMC entre 25 y 30, es decir, con posible sobrepeso Otros cuatro sujetos (5, 8, 9 y 10) se encuentran entre los índices 20 y 25, considerado normal o saludable. El nº 5 presenta el somatotipo que determinado desconocido (2,5-1,6-2) debido a que presenta valores muy poco usuales, no predominando ninguno de los valores. En la somatocarta se encuentra cerca del los valores característicos del central, pero hacia el endo-ectomorfo. El número 8, endo-ectomorfo, dominancia de la ectomorfia, predominando la endomorfia claramente mayor que la mesomorfia. Este sujeto, junto con el 9 y el 10, tienen valores de los considerados normales en el IMC (20,59; 24,39 y 23,39 respectivamente) y con somatotipos endomorfo balanceado (endomorfia dominante, siendo la mesomorfia y la ectomorfia iguales o con diferencias menores de media unidad) y ecto-endomorfo (endomorfia dominante, siendo la ectomorfia claramente mayor que la mesomorfia) El sujeto 7, ectomorforo balanceado, presenta un IMC de 15,93, lo que señala que dicho deportista es excesivamente delgado, con un porcentaje graso del 8, 92 %. Se trata del único componente del equipo que se encuentra por debajo de índice 20 del IMC. La percepción inicial, en este caso, coincidía plenamente con los resultados, delgado en exceso, con aparente fragilidad. Del mismo modo, en el capítulo IV de Manual de valoración funcional (Legido y cols. 1996) se nos ofrecen unas tablas de valoración morfológica donde nos dan unos valores de referencia sobre peso total e IMC, %graso de la población deportiva (por deportes), %grasa de la población general y los valores del somatotipo de los deportistas de los diferentes deportes, todo ello para varones y mujeres. Según estas referencias y atendiendo a los resultados obtenidos con los sujetos del estudio podemos decir: – Teniendo en cuenta la altura así como el rango de peso y el rango del IMC, cinco de ellos (1, 5, 9, 10, 11) se encontrarían dentro de los rangos propuestos, mientras que cuatro de ellos (2, 3, 4, 6) no estrían dentro al situarse por encima y los otros dos (7, 8) se encontrarían por debajo de dichos valores de referencia. – En cuanto a la proporción de grasa teniendo en respecto a futbolistas, ninguno, excepto el número 7, estaría dentro del rango de lo que presentan dicho grupo de deportistas. En referencia al otro grupo más general, el de los futbolistas amateurs, cuatro sujetos (5, 7, 8, 9) ya se situarían dentro de ese rango. – Respecto a la proporción de grasa de la población general. Cinco de ellos (5, 7, 8, 9, 10) están en el rango óptimo (8-15 %), tres de ellos (1, 6, 11) con un ligero sobre peso, el 3 con sobrepeso y el 2 y el 4 están dentro de la obesidad (>25 %) – En cuanto al somatotipo del jugador de futbol sala, éste sería, endo-mesomorfo, con predominio de la mesomorfia y la endomorfia claramente superior a la ectomorfia, por lo que ninguno de los sujetos estudiados corresponde con este somatotipo.
6. Conclusiones
A lo largo de los puntos anteriores se han ido incluyendo algunas reflexiones, que podrían catalogarse de conclusiones del estudio, pero que en este punto reflejaremos de forma esquemática. a. El somatotipo de los jugadores se acerca a parámetros de personas sin discapacidad y sedentarias, por lo que la actividad física que llevan a cabo es de vital importancia, para que no se disparen aspectos relacionados con el sedentarismo (obesidad, problemas vasculares, colesterol…) b. La comparación de los valores de un grupo de discapacitados respecto a otros de población general o deportista sin discapacidad no tiene más sentido que el comprobar que los datos de éstos (los discapacitados) no difieren demasiado, a excepción de aquellos que debido a las características de su discapacidad. c. La actividad física en poblaciones especiales es factor importante para ayudar a controlar aspectos como la proporción de grasa, el índice de masa corporal y hacer que los sujetos mantengan hábitos saludables que repercutirá en su calidad de vida. La propuesta de entrenamiento, atendiendo a las peculiaridades de estos grupos de deportistas deberían ir encaminadas a la realización de actividades de larga duración y de intensidad media para ayudar a la reducción de los niveles de grasa corporal y así como al mantenimiento de hábitos saludables de vida. Aspectos como la alimentación, actividades de ocio y tiempo libre, atención y ayuda, son fundamentales para tener una mayor calidad de vida de quien ya de por si tiene alguna dificultad añadida (con discapacidad)
Bibliografía
- Candá Moreno, A.; Espaza Ros, F. (1996) Cineantrompometría. En AA.VV: Métodos de estudio de composición corporal en deportistas. Investigación en el Deporte nº8, pp. 59-79.C.S.D. y M.E.C. Madrid.
- Carter, J.E.L (2002) The Heath-Carter Antrhopometric Somatotype. Instruction Manual. Adaptación del manual de instrucciones original: Anthropometry Illustrate” (Ross, Carr & Carter 1999) in association with TeP and ROSSCRAFT. Surrey. Canada.
- García Manso, J.M.; Navarro Valdivielso, M.; Ruiz Caballero, J.A. (1996) Pruebas para la valoración de la capacidad motriz en el deporte. Gymnos. Madrid.
- Nájera Garcidueñas, MªM.; Díaz Cisneros, F.J.; Rodríguez Gúzman, L. (2000) Prevalencia de factores de riesgo cardiovascular en un grupo de personas con discapacidad mental. Lecturas: Educación Física y Deportes. http://www.efdeportes.com Revista digital. Buenos Aires. Año 5 – nº 19. Marzo 2000.
- Legido, J.C., Segovia, J.C. y L-Silvarrey F.J. (1996) Manual de valoración funcional. Eurobook. Madrid.
- Pacheco del Cerro, J.L.(1996) Valoración antropométrica de la masa grasa en atletas de élite. En Métodos de estudio de composición corporal en deportistas. MEC – CSD (1996). Investigación en el deporte nº 8.
- Villagra Astudillo, H.A.; Luna Oliva, L. (2000)La obesidad como factor de riesgo en la persona con síndrome de Down, frente a la alternativa de la actividad física y deportiva. Lecturas: Educación Física y Deportes. http://www.efdeportes.com Revista digital. Buenos Aires. Año 5 – nº 18. Febrero 2000.