+34 96 633 71 35
·WhatsApp·

7 Jun 2012

Efectos de un programa de actividad física sobre la velocidad de respuesta en la musculatura flexora y extensora de la rodilla en pacientes de alzheimer

/
Posted By
/
Comments0
/

El objetivo de este estudio fue evaluar los efectos de un programa de actividad física en pacientes de Alzheimer, mediante la Tensiomiografía (TMG), el desplazamiento radial máximo del vientre muscular

Autor(es): Sarmiento, S.; Rodríguez-Matoso, D.; De Saa, Y.; Bartolomé de la Rosa, D.; García-Manso, J.M.; Rodríguez-Ruiz, D.
Entidades(es): Departamento de Educación Física de la ULPGC.
Congreso: VII Congreso Nacional de Ciencias del deporte y educación Física
Pontevedra – 5, 6 y 7 de Mayo de 2011
ISBN: 978-84-614-9945-8
Palabras claves: Alzheimer, Actividad Física, Tensiomiografía, Control postural

Efectos de un programa de actividad física sobre la velocidad de respuesta en la musculatura flexora y extensora de la rodilla en pacientes de alzheimer

Resumen

El objetivo de este estudio fue evaluar los efectos de un programa de actividad física en pacientes de Alzheimer, mediante la Tensiomiografía (TMG), el desplazamiento radial máximo del vientre muscular (Dm) y la velocidad de respuesta (Vrn) de la musculatura extensora (Vasto Lateral – VL, Vasto Medi  al – VM y Recto Femoral – RF) y flexora (Biceps Femoral – BF) de la articulación de la rodilla. Se valoraron18 pacientes (12 mujeres y 6 hombres) con una edad media de 75,3 años (+/- 5,6), diagnosticados con la enfermedad de Alzheimer (grado leve o moderado). La muestra correspondía a un grupo de sujetos que participaron en un programa de intervención de actividad física de 3 meses de duración (5 días a la semana con un Total de 60 sesiones). Las tareas del programa, integran tareas encaminadas a desarrollar el equilibrio (24 sesiones), la coordinación (36 sesiones), la movilidad articular (24 sesiones), la eficiencia metabólica (24 sesiones) y el tono muscular (36 sesiones). Los datos reflejan una aumento de Vrn en RF (p<0,00) y BF (p<0,00) y, un mantenimiento en VL y VM, mientras que los valores de Dm tienden a mantenerse o modificarse levemente, tras la realización del programa de intervención de actividad física de tres meses de duración y que compromete al sistema neuromuscular de la musculatura extensora y flexora de la rodilla. Por último, la TMG se muestra como una herramienta útil para evaluar la eficacia funcional de la musculatura flexora y extensora de la rodilla mediante la evaluación de la Velocidad de respuesta normalizada (Vrn) y el desplazamiento radial del vientre muscular (Dm) en sujetos de edad avanzada y que se muestran como indicadores eficaces de la pérdida de calidad en los movimientos dinámicos y, por tanto, de autonomía e independencia de las personas mayores.

Introducción

La reducida masa muscular que presentan las personas mayores conllevan importantes limitaciones funcionales y discapacidades que van asociadas al envejecimiento (Leenders, 2003). Su aparición es la causa principal de la reducción de la fuerza entre los 25 y los 80 años de edad (Mcardle et al., 2001). Si a ello le unimos la disminución de la masa corporal global, la reducción de actividad física y la aparición de patologías específicas asociadas a este sector de población y las frecuentes caídas que suelen presentar (Goodpaster et al., 2006; Forrest, et al., 2007; Sayer et al., 2008).
De todos los sistemas del organismo, el neuromuscular es uno de los que muestran diferencias relevantes entre los sujetos más hipocinéticos y los más físicamente activos. La musculatura que no se utiliza, se deteriorará más rápidamente con el paso del tiempo y, en edades avanzadas, mostrará peores condiciones funcionales (Buckwalter, 1997; González & Vaquero, 2002, Wilmore & Costill, 2004).
Además, debemos tener presente que la fuerza muscular de los miembros inferiores disminuye más rápidamente que en la que se encuentra en la porción superior del cuerpo (Janssen et al., 2000), sin deferencia de sexo (Janssen et al., 2000; Camiña et al., 2001). Esto constituye un problema añadido en aquellas personas mayores frágiles, al incrementar el riesgo de sufrir caídas en su vida diaria (Schrager et al., 2003). Estos cambios morfológicos y funcionales afectan a la calidad de vida de los sujetos, debido a una disminución de la capacidad contráctil del músculo (Hunter et al., 2004).
El proposito de nuestro estudio fue evaluar los efectos de un programa de actividad física en pacientes de Alzheimer, mediante la Tensiomiografía (TMG), el desplazamiento radial máximo del vientre muscular (Dm) y la velocidad de respuesta (Vrn) de la musculatura extensora (Vasto Lateral – VL, Vasto Medial – VM y Recto Femoral – RF) y flexora (Biceps Femoral – BF) de la articulación de la rodilla.


Completa la información

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº15.

¡Consíguelo aquí!

Material y Método

Muestra. Se evaluaron18 pacientes (12 mujeres y 6 hombres) con una edad media de 75,3 años (+/- 5,6), diagnosticados con la enfermedad de Alzheimer (grado leve o moderado). La muestra correspondía a un grupo de sujetos que participaron en un programa de intervención de actividad física de 3 meses de duración (5 días a la semana con un Total de 60 sesiones). Las tareas del programa, integran tareas encaminadas a desarrollar el equilibrio (24 sesiones), la coordinación (36 sesiones), la movilidad articular (24 sesiones), la eficiencia metabólica (24 sesiones) y el tono muscular (36 sesiones).
Los familiares de los pacientes y la directiva de la Asociación Azheimer Canarias, fueron informados de las características del estudio y firmaron en calidad de tutores el consentimiento escrito. Todos los participantes en el estudio siguieron rigurosamente los criterios propuestos en la Declaración de Helsinki para la investigación con seres humanos.
Procedimiento de medición. La TMG mide la respuesta muscular mediante un sensor de presión colocado sobre el vientre muscular del músculo seleccionado, asegurándonos de que se encontraba colocado perpendicularmente al vientre muscular, orientado en la dirección que tomaría durante su deformación (Valencic & Knez, 1997) y con la posición del segmento en semiflexión de aproximadamente 30º (Djordjevic et al., 2000, Simunic & Valencic et al., 2001, Gorelick & Brown, 2007). Para provocar la contracción (isométrica) se aplica una corriente eléctrica bipolar (100 mA), de un milisegundo de duración, a través de dos electrodos situados sobre el músculo, no afectando en ningún caso a los tendones de inserción (Knez & Valencic, 2000; Valencic, 2002; Simunic, 2003). Para evitar el fenómeno de activación post-tetánica cada estimulación era realizada con la suficiente pausa entre cada estimulo (Belic et al., 2000, Simunic, 2003, Rodríguez-Matoso, et al. 2010). La reproducibilidad del método y la validez del protocolo experimental que emplea la TMG han sido estudiadas en diferentes trabajos presentándose como una herramienta de alta precisión (Dahmane et al., 2000; Belic et al., 2000, Simunic & Valencic, 2001, Simunic, 2003, Krizaj, 2008; Tous-Fajardo et al., 2010; Rodríguez-Matoso et al., 2010).
De cada estimulación se obtiene información numérica sobre la magnitud de los desplazamientos radiales del músculo y del momento en que estos cambios morfológicos se producen (Valencic & Knez, 1997; Simunic, 2003). De todos los datos obtenidos nos centramos en el estudio de los parámetros de desplazamiento radial máximo del vientre muscular (Dm) y la Velocidad de respuesta normalizada (Vrn).
El Desplazamiento máximo (Dm) viene dado por el desplazamiento radial del vientre muscular expresado en milímetros. Representa y evalúa el stiffness (rigidez) muscular, variando en cada sujeto y por cada grupo muscular en función de sus características morfofuncionales y de la forma en que esas estructuras han sido trabajadas mediante el entrenamiento. Valores bajos, respecto a los valores medios de los presentados en una población tipo, nos indican un elevado tono muscular y un exceso de rigidez, mientras que, valores mayores, indican una falta de tono muscular o un grado elevado de fatiga (Valencic et al., 2001; Dahmane et al., 2001, Hunter et al. 2006, Krizaj et al., 2008; Quiroga et al., 2009 y Rodríguez-Ruiz et al., 2009).

 

La Velocidad de respuesta normalizada (Vrn) representa la relación entre la diferencia del desplazamiento radial entre el 10% y el 90% de Dm y el incremento del tiempo de contracción muscular  entre esos mismos valores (Eq.1). Valencic & Knez (1997) nos dicen que para poder comparar los valores obtenidos en musculos diferentes debemos normalizar este incremento de tiempo. La forma de conseguirlo es dividir la equación realizada anteriormente por el Dm de cada musculo (Eq. 2). Los autores no dicen que  es igual a 0,8 por Dm. Por tanto, la velocidad respuesta normalizada sería igual a 0,8 partido por el incremento de tiempo de contracción muscular entre el 10 y 90% de Dm (Eq. 3):

Eq. 1

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

Eq. 2.

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

Eq. 3.

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

Análisis Estadístico. Tras el análisis de normalidad (Shapiro-Wilk) se realizó una comparación de medias para muestras independientes para los datos de VL y BF de ambas piernas (post hoc de Bonferroni con nivel de significación de p?0.05). Para el tratamiento estadístico se utilizó el paquete SPSS-v17 (SPSS Inc., Chicago, IL, USA).

Resultados

Los datos obtenidos por los sujetos de nuestra muestra en los parámetros analizados con la TMG en la prueba post-intervención, manifiestan una variación respecto a los datos pre-intervención para Vrn y Dm en cada uno de los músculos analizados (Tabla 1):

Tabla 1: Media y desviación estandar de los resultados de Vrn y Dm para los músculos analizados en los pacientes de Alzheimer, en la prueba antes (Pre) y después (Post) de la intervención y la diferencia obtenida entre prueba (** p

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

Respecto al RF se observa que Vrn aumenta de forma significativa en ambas piernas (p<0,00), en cambio Dm tiende a aumentar en la pierna derecha y a disminuir en la izquierda después del programa de intervención de actividad física (Figura 1).

Figura 1: Box-Plot de los resultados de RF antes (Pre) y después (Post) del programa de actividad física en pacientes de alzheimer para Vrn (mm/s) y Dm (mm), tanto en pierna derecha como izquierda (p

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

VL presenta el mismo comportamiento para Vrn como en Dm, tendiendo a aumentar en la pierna derecha y a disminuir en la pierna izquierda, después del programa de intervención de actividad física, si bien ambas diferencias no son estadísticamente significativas (Figura 2).

Figura 2: Box-Plot de los resultados de VL antes (Pre) y después (Post) del programa de actividad física en pacientes de alzheimer para Vrn (mm/s) y Dm (mm), tanto en pierna derecha como izquierda (p

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

Por otro lado, VM presenta el mismo comportamiento para Vrn que en VL, tendiendo a aumentar en la pierna derecha y a disminuir en la pierna izquierda. Pero en cambio, en Dm tiende a aumentar en ambas piernas (Figura 3).

Figura 3: Box-Plot de los resultados de VM antes (Pre) y después (Post) del programa de actividad física en pacientes de alzheimer para Vrn (mm/s) y Dm (mm), tanto en pierna derecha como izquierda (p

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

En BF se obtiene un aumento, estadísticamente significativo (p<0,00), en Vrn para ambas piernas, mientras que Dm se produce una ligera disminución en la pierna izquierda y un ligera aumento en la pierna derecha (Figura 4).

Figura 4: Box-Plot de los resultados de BF antes (Pre) y después (Post) del programa de actividad física en pacientes de alzheimer para Vrn (mm/s) y Dm (mm), tanto en pierna derecha como izquierda (p

Contenido disponible en el CD Colección Congresos nº 15

Discusión

Los datos reflejan una aumento de Vrn en RF (p<0,00) y BF (p<0,00) y, un mantenimiento en VL y VM, mientras que los valores de Dm tienden a mantenerse o modificarse levemente, tras la realización del programa de intervención de actividad física que engloba ejercicios para la mejora del equilibrio (24 sesiones), la coordinación (36 sesiones), la movilidad articular (24 sesiones), la eficiencia metabólica (24 sesiones) y el tono muscular (36 sesiones).
Existe un consenso generalizado en aceptar que la capacidad de realizar movimientos veloces (fuerza dinámica) declina más rápidamente con la edad que la capacidad de mantener el equilibrio estático o fuerza estática (Izquierdo et al., 1999; Lanza et al., 2003; Skelton et al., 1994; Valour et al., 2003; Hwang et al., 2006). También es aceptado que alteraciones en la velocidad de desplazamiento conlleva el riesgo de caídas en personas mayores (Melzer et al., 2004; Holbein et al., 2007; Maciaszek, 2010).

La mejora de Vrn en RF (p<0,00) y BF (p<0,00) y, un mantenimiento en VL y VM, manifiesta una adaptación positiva, de los sujetos de nuestra muestra, al proceso de entrenamiento al que fueron sometidos. Estos datos coinciden con los aportados en la revisión realizada por Hazell et al. (2007) sobre el efecto que tienen la aplicación de programas de entrenamiento de fuerza a personas mayores. En ella se señala que los protocolos que incluyen ejercicios de potencia logran una mejor predisposición de la persona a las actividades de la vida diaria (caminar, subir escaleras, levantarse desde la posición de sentado, etc…), respecto a entrenamientos que se centren en la realización de ejercicios de resistencia y de la mejora de la fuerza general. Estos últimos, aunque mejoran la condición física de la persona mayor, no son tan efectivos para las acciones dinámicas que compromentan el desplazamiento y el equilibrio dinámico.
Uno de los aspectos más interesantes que hemos encontrado al analizar los cambios motivados por un programa de intervención que incluye, no sólo elementos condicionales sino también ejercicios de coordinación y equilibrio. Si tenemos presente que RF y BF son músculos antagonistas entre sí entenderemos mejor su papel fundamental en el equilibrio de la persona mayor (Asaka & Wang, 2008), y, por tanto, condicionan la eficacia de la marcha. Se puede observar que entre los sujetos de nuetra muestra es justamente estos dos músculos los que obtienen mayores transformaciones al final del protocolo de intervención. Esto nos lleva a pensar que las tareas aplicadas al grupo experimental conllevan, al final del proceso, una mejora en la estabilización del cuerpo y especialmente de la cadera que lleva a favorecer la marcha y, en general, la autonomía para la realización de las actividades de la vida diária. Por otro lado, podríamos entender que la mejora sea especialmente evidente en esta musculatura, debido a que RF y BF se vé menos comprometida que la de VL y VM durante los procesos degenerativos propios del envejecimiento (Scelsi et al., 1980; Grimby et al., 1982; Lidboe et al., 1982, LeBlanc et al., 1995 y Akima et al., 2000).
Estos cambios morfológicos y funcionales afectan a la calidad de vida de los sujeto. Una disminución de la capacidad contráctil del músculo, la pérdida de fuerza y el descenso de la potencia y resistencia muscular, traen consigo problemas que afectan a la forma de afrontar la vida diaria (Hunter et al., 2004). Por tanto, la ganancia obtenida en Vrn por los sujetos de nuestra muestra en BF y RF, y, un mantenimiento en VL y VM, manifiestan una mejora en la calidad de respuesta muscular que les ayudaran a vivir con autonomía e independencia.
En relación al Dm, se observa un mantenimiento del máximo desplazamiento radial de la musculatura o stiffness con una tendencia a aumentar ligeramente, mostrando una adaptación de casi todos los músculos evaluados al programa de actividad física. Si bien valores bajos de Dm, respecto a los valores medios de los presentados en una población tipo, nos indican un elevado tono muscular y un exceso de rigidez en las estructuras del músculo y, por otro lado, valores elevados indican una falta de tono muscular o la aparición de fatiga (Valencic et al., 2001; Dahmane et al., 2001 y Krizaj et al., 2008). No obstante, siempre debemos tener presente la sarcopenia característica entre los sujetos de las poblaciones de edad avanzada (Doherthy, 2003). Aquellos músculos que presentan una importante pérdida de su masa muscular condicionan la magnitud de su deformación radial cuando es estimulado.

En nuestro caso, personas mayores con una edad media de 75,3 años (+/- 5,6), no podemos mantener este mismo criterio ya que las características morfológicas de la musculatura se ven alteradas por la disminución de elementos contráctiles (Young et al., 1984, Larsson et al., 1996 y Trappe et al., 2004), la reducción del número total de fibras musculares (Kamel, 2003) y la disminución del tamaño de las fibras musculares tipo II o de contracción rápida (Scelsi etal., 1980; Grimby et al., 1982; Lidboe et al., 1982, LeBlanc et al., 1995 y Akima et al., 2000), por una pérdida de unidades motoras (Stolberg & Fawcett, 1982 y Antonutto et al., 1999) y, por tanto, de tono muscular (Pisot et al., 2008).

Conclusiones

Los datos reflejan una aumento de Vrn en RF (p<0,00) y BF (p<0,00) y, un mantenimiento en VL y VM, mientras que los valores de Dm tienden a mantenerse o modificarse levemente, tras la realización del programa de intervención de actividad física de tres meses de duración y que compromete al sistema neuromuscular de la musculatura extensora y flexora de la rodilla.
Por último, la TMG se muestra como una herramienta útil para evaluar la eficacia funcional de la musculatura flexora y extensora de la rodilla mediante la evaluación de la Velocidad de respuesta normalizada (Vrn) y el desplazamiento radial del vientre muscular (Dm) en sujetos de edad avanzada y que se muestran como indicadores eficaces de la pérdida de calidad en los movimientos dinámicos y, por tanto, de autonomía e independencia de las personas mayores.

Agradecimiento

A todos los sujetos que intervinieron en el estudio, a sus familiares y a la Asociación Alzheimer Canarias.

Bibliografía

Akima H, Kawakami Y, Kubo K, Sekiguchi C, Ohshima H, Miyamoto A &, Fukunaga T. (2000) Effect of short-duration spaceflight on thigh and leg muscle volume. Med Sci Sports Exerc 32: 1743–1747.
Antonutto G, Capelli C, Girardis M, Zamparo P & di Prampero PE. (1999) Effects of microgravity on maximal power of lower limbs during very short efforts in humans. J Appl Physiol 86: 85–92.
Asaka, T. & Wang, Y. (2008) Effects of Aging on Feddforward Postural Synergies. Journal of Human Kinetics. 20: 63-70.
Belic, A., Knez, N., Karba, R. & Valencic, V. (2000) Validation of the human muscle model. Proceedings of the 2000 Summer Computer Simulation Conference, 16. – 20. July 2000, Vancouver, British Columbia. Session 1: Issues on Whole Body Modeling.
Buckwalter, J.A. (1997) Decrease mobility in elderly: the exercise antidote. The Physician and Sports Medicine. 25 (9).

Camiña Fernández, F.; Cancela Carral, J.M. & Romo Pérez, V. (2001) La prescripción del ejercicio físico para personas mayores. Valores normativos de la condición física. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de la Actividad Física y el Deporte vol. 1 (2) p. 136-154.
Dahmane, R., Knez, N. Valencic, V. & Erzen, I. (2000) Tensiomyography, a non-invasive method reflecting the percentage of slow muscle fiber in human skeletal muscles. Book of Abstract: Life Sciencies 2000, Gozd Martuljek, Slovenia, September 28th to October 1st, 2000, pp./str. 29.
Djordjevic, S., Valencic, V., Knez, N., Dahmane, R., Jurcic-Zlobec, B., Bednarik, J. Simunic, B., Kersevan, K. & Godina, N. (2000) Contractile properties of skeletal muccles of two groups of sportsmen-sprinters and cyclist measured by Tensiomyography. 2000 Pre-Olympic Congress, Brisbane, Australia, Abstract 220.
Doherty, T.J. (2003). Invited review: aging and sarcopenia.  Journal of Applied Physiology, 95(4): 1717-1727.
Forrest KY, Zmuda J & Cauley J. (2007) Patterns and correlates of muscle strength loss in older women. Gerontology. 53:140-7.
González, J.M. & Vaquero, M. (2000) Indicaciones y sugerencias sobre el entrenamiento de fuerza y resistencia en ancianos. Int J Med Sci Physic Activity Sport. 1: 41-48.
Goodpaster BH, Park SW, Harris TB, Kritchevsky SB, Nevitt M, Schwartz AV, Simonsick EM, Tylavsky FA, Visser M & Newman, AB.. (2006) The loss of skeletal muscle strength, mass, and quality in older adults: the health, aging and body composition study. J Gerontol A Biol Sci Med Sci. 61:1059-64
Gorelick, M.L. & Brown, J.M. (2007) Mechanomyographic assessment of contractile properties within seven segments of the human deltoid muscle. Eur J Appl Physiol. 100(1): 35-44.
Grimby, G.; Danneskiold-Samsoe, B.; vid, K. & Saltin, B. (1982) Morphology and enzyme capacity in arm and leg muscles in 78-81 year old men and women. Acta Physiol Scand. 115: 125-134.
Hazell, T.; Kenno, K & Jakobi, J. (2007) Functional Benefit of Power Training for Older Adults. Journal of Aging and Physical Activity. 15:349-359.
Holbein J, Mary J A, McDermott K, Shaw C & Demchak J. (2007) Validity of functional stability limits as a measure of balance in adults aged 23-73 years. Ergonomics. 50(5): 631–646
Hunter, G.R.; McCarthy, J.P. & Bamman, M.M. (2004) Effects of resistance training on older adults. Sports Med. 34 (5): 329-348.
Hwang IS, Huang CT & Cherng CC. (2006) Postural fluctuations during pointing from a unilateral or bilateral stance. Hum. Mov. Sci. 25: 275-291.
Izquierdo M, Ibanez J, Gorostiaga E, Garrues M, Zuñiga A, Antón A, Larrión, JL & Hakkinen, K. (1999) Maximal strength and power characteristics in isometric and dynamic actions of the upper and lower extremities in middle-aged and older men. Acta Physiol Scand. 167:57–68.

Janssen I, Heymfield, SB, Wang Z & Ross R. (2000) Skeletal muscle mass and distribution in 468 men and women aged 18–88 yr. J Appl Physiol. 89:81-88.
Kamel, H. (2003) Sarcopenia and aging. Nutrition Reviews. 61(5): 157-167.
Knez, N. & Valencic, V. (2000) Proceedings of the ninth Electrocehnical and Computer Science Conference ERK 2000, 21-23, September 2000, Portoroz, Slovenia. Ljubljana : IEEE Region 8, Slovenian section IEEE, Vol. B, pp. 301-304.
Krizaj, D., Simunic, B. & Zagar, T. (2008) Short-term repeatability of parameters extracted from radial displacement of muscle belly. Journal of Electromyography and Kinesiology, 18: 645-651.
Lanza IR, Towse TF, Caldwell GE, Wigmore DM & Kent-Braun JA. (2003) Effects of age on human muscle torque, velocity, and power in two muscle groups. J Appl Physiol.;95:2361–2369.
Larsson L, Li X, Berg HE & Frontera WR. (1996) Effects of removal of weight-bearing function on contractility and myosin isoform composition in single human skeletal muscle cells. Pflügers Archiv European Journal of Physiology 432: 320–328.
LeBlanc A, Rowe R, Schneider V, Evans H & Hedrick T. (1995) Regional muscle loss after short duration spaceflight. Aviat Space Environ Med 66: 1151–1154.
Leenders, N. (2003) The elderly, en Ehrman J.K.; Gordon, P.M.; Visich, P.S. & Keteyian, S.J. (edits.): Clinical Exercise Physiology, Ed. Human Kinetics, Champaing (IL, USA).
Lidboe, C.F. & Torvik, A. (1982) The effects of ageing, cachexia and neoplasms on striated muscle. Quantitive histiological and histochemical observations on an autopsy material. Acta Neuropathol. 57: 85-92.
Maciaszek, J. (2010) Muscle Strength and Aerobic Endurance as Factors Differentiating Falling and Non-Falling Men over 70 Years. Journal of Human Kinetics. 25: 35-40.
Mcardle, W.D.; Katch, F.I. & Katch, F.L. (2001) Exercise Physiology: Energy, Nutrition, and Human Performance (5th ed.). Hagerstown, MD: Lippincott Williams & Wilkins..
Melzer I, Benjuya N. & Kaplanski J. (2004) Postural stability in the elderly: a comparison between fallers and non-fallers. Age Ageing. 33(6): 602–607
Pisot R, Narici MV, Simunic B, De Boer M, Seynnes O, Jurdana M, Biolo G & Mekjavic IB. (2008). Whole muscle contractile parameters and thickness loss during 35-day bed-rest. Journal of Applied Physiology 104(2): 409-414.
Quiroga, M.E., Rodríguez-Ruiz, D., Rodríguez-Matoso, D., Sarmiento, S., Losa, J., de Saá, Y. & García-Manso, J.M. (2009) Evaluación de las características mecánicas del músculo mediante la tensiomigrafía. Estudio de casos. VIII Congreso Internacional sobre Entrenamiento en Voleibol. Junta de Castilla y León. Valladolid, 10-12 de octubre.

Rodríguez-Matoso D., Rodríguez-Ruiz D., Sarmiento S., Vaamonde D. Da Silva-Grigoletto M.E. & García-Manso J.M. (2010) Reproducibility of muscle response measurements using tensiomyography in a range of positions. Rev Andal Med Deporte. 3(3):81-86.
Rodríguez-Ruiz, D., Quiroga, M.E., Rodríguez-Matoso, D., Sarmiento, S., Losa, J., De Saá, Y. & García-Manso, J.M. (2009). Aplicación de la tensiomiografía (tmg) en jugadores de voleyplaya. Estudio de caso. (pp. 121-130). En O. Usabiaga, J. Castellano & J. Etxebeste (Eds.) Investigando para innovar en la actividad física y el deporte. Ed. Gidekit. Vitoria (Spain).
Sayer AA, Dennison EM, Syddall HE, Jameson K, Martin HJ & Cooper C. (2008) The developmental origins of sarcopenia: Using peri­pheral quantitative computed tomography to assess muscle size in older people. Journal of Gerontology: Medical Sciences. 63A:835-40
Scelsi, R.; Marchetti, C. & Poggi, P. (1980) Histochemical and ultrastructural aspects of m. vastus lateralis in sedentary old people (65-89 years). Acta Neuropathol. 51: 99-105.
Schrager M, Bandinelli S, Maggi S & Ferucci L. (2003) Sarcopenia: Twenty open questions for research agenda. Basic Appl Myol. 13 (4): 203-208.
Simunic, B. (2003). Model of longitudinal constractions and transverse deformations in skeletal muscles. Doctoral Thesis. Ljubljana.
Simunic, B. & Valencic, V. (2001) Procedings of X Electrochenical and Computer Science Conference. IEEE Region 8, Slovenian Section IEEE, Vol. B, pp: 363-366. 24-26 de septiembre de 2001. Portoroz (Eslovenia).
Skelton DA, Greig CA, Davies JM & Young A. (1994) Strength, power and related functional ability of healthy people aged 65-89 years. Age Ageing. 23:371–377.
Stolberg, E. & Fawcett, P. (1982) Macro EMG in healthy subjects of different ages. J. Neurology Neurosurgery and Phsychiatry. 5:870-878.
Tous-Fajardo, J., Moras , G., Rodríguez-Jiménez , S., Usach , R., Doutres , D.M. & Maffiuletti, N.A. (2010) Inter-rater reliability of muscle contractile property measurements using non-invasive tensiomyography. Journal of Electromyography and Kinesiology. 20(4): 761-766.
Trappe S, Trappe T, Gallagher P, Harber M, Alkner B & Tesch P. (2004) Human single muscle Fibre function with 84 day bed-rest and resistance exercise. J Physiol 557: 501–513.
Valencic, V. & Knez, N. (1997) Measuring of the skeletal muscles dynamic properties. Artific Org. 21: 240-242.
Valencic, V. (2002) Method for selective and non-invasive detection of skeletal muscles contraction process. International Application Published under the Patent Cooperation Treaty (PCT). Nº WO 02/074167 A1.

Valencic, V., Knez, N. & Simunic, B. (2001) Tenziomiography: Detection of skeletal muscle responce by Means of radial muscle belly displacement. Biomedical Engineering, 1: 1-10.
Valour D, Ochala J, Ballay Y & Pousson M. (2003) The influence of ageing on the force-velocity-power characteristics of human elbow flexor muscles. Exp Gerontol. 38:387–395.).
Wilmore, J. H. & Costill, D. L. (2004) Physiology of sport and exercise (3rd ed.). Edit. Human Kinetics.
Young, A.; Stokes, M. & Crowe, M. (1984) Size and strength of the quadriceps muscle of old and young women. Eur. J. Clin. Invest. 14: 282 – 287.

Open chat
Saludos de Alto Rendimiento:

Para información sobre los cursos y másteres ONLINE, puede contactarnos por aquí.

Asegúrate de haber completado el formulario (azul) de información del curso/máster.

Gracias!